El dueño del kiosko que ha repartido la suerte se siente "muy feliz y afortunado" y no tiene "ni idea" de quiénes son los afortunados
SANTANDER, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
Carlos Díaz, propietario del 'kiosko' de Santander donde se han vendido siete décimos del número 71.198, agraciado con El Gordo del Sorteo de Lotería de Navidad, se siente "muy feliz" y "muy afortunado" por haber repartido la suerte entre sus clientes, en total 2,8 millones de euros.
El dueño de este establecimiento, ubicado en la calle Gregorio Marañón 1 de la capital cántabra, en El Sardinero, no tiene "ni idea" de quién ha comprado los décimos -dotados cada uno de ellos con 400.000 euros-.
Tampoco sabe cómo los ha vendido, si "de uno en uno" o "varios" a la vez. Igualmente, desconoce si los afortunados son santanderinos o de fuera de la ciudad.
En declaraciones a Europa Press después de cantarse el premio, a las 11.54 horas, Díaz ha admitido que aún no había "asimilado" la noticia, de la que se ha enterado por los medios de comunicación, que le han empezado a llamar.
El 'kioskero' ha indicado a esta agencia que abrió el negocio hace aproximadamente un año, y ha destacado que también repartió un premio de 150.000 euros hace unos meses.