SANTANDER 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Botín presenta la obra '7.8 Hz' de Carsten Höller en los Jardines de Pereda de Santander, una intervención realizada específicamente para este espacio con la iluminación del parque. A intervalos fijados, las luces parpadean a través de un generador de corriente, dando lugar a diferentes intensidades, que activan un sugestivo cine cerebral en la mente del visitante.
Los Jardines de Pereda son protagonistas de '7,8 Hz', una instalación site-specific encargada por la Fundación Botín al artista Carsten Höller, consistente en la modificación de las fuentes de luz constantes que iluminan el parque, transformándolas en una frecuencia de luz parpadeante, según ha informado la Fundación Botín en un comunicado.
El título de la obra (7,8 Hz) hace referencia a una frecuencia exacta de intermitencia de luces también conocida como Resonancia Schumann. Se trata de la misma frecuencia que se registra en el campo electromagnético de la Tierra y, casualidad o no, es también una frecuencia muy potente que se utiliza en la modulación de ondas cerebrales y que, en el ser humano, estimula los niveles de hormonas de crecimiento y el flujo sanguíneo cerebral, induciendo a un estado de consciencia profunda.
La intervención de Carsten Höller se pone en marcha diariamente al mismo tiempo que el sistema de encendido automático del alumbrado público de Santander y estará en funcionamiento hasta la inauguración del Centro Botín.
El ciclo de parpadeo de la pieza, cuya duración es de aproximadamente tres minutos, se producirá cada hora desde el apagado de las luces del tiovivo de los jardines (20:00 horas en invierno y 21:00 horas en verano) y finalizará cada día cuando se apague el alumbrado público. La primera sesión ha comenzado este viernes, sobre las 20.30 horas.
La intervención abarca prácticamente todos los sistemas de iluminación existentes en los Jardines de Pereda: 15 farolas 'multipro' situadas en el Paseo Pereda y en la Plaza de Alfonso XIII; 74 farolas tipo UFO, de una sola luminaria, situadas en las plazas interiores de los jardines y caminos principales, secundarios y terciarios; y las seis luminarias empotradas que alumbran el templete de música.
Desde los inicios de su trayectoria artística, Carsten Höller, quien inicialmente se especializó como biólogo-científico, ha centrado su interés en implicar al espectador para que experimente su obra activamente y en primera persona, en función de la respuesta que genera su propio sistema neurológico.
Las pulsaciones de luz, por así decirlo, han supuesto un elemento esencial en el vocabulario visual del artista. De hecho, la frecuencia en la que el ojo es capaz de descifrar un destello ha sido de interés para Höller, lo mismo que descubrir cómo puede generar determinadas sensaciones a partir de la frecuencia utilizada en el parpadeo de sus obras.
El efecto de los destellos en la actividad cerebral comenzó a observarse e investigarse en la década de los años veinte en Alemania e impulsó la aparición de la electroencefalografía. Los avances posteriores, que fueron posibles gracias a la invención de la luz estroboscópica, permitieron que en esta investigación se indujeran ciertos estados mediante el uso de varios ritmos de pulsaciones de luz.
"7,8 hertzios es una frecuencia que interactúa con las ondas cerebrales creando una sensación muy particular", dice Höller. "El parpadeo de las luces es muy parecido a una alucinación, puede hacerte experimentar sensaciones que no están realmente allí. Empiezas a ver colores y a escuchar de manera diferente", añade el artista.
El alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, ha valorado la intervención de Carsten HÖller como "un nuevo elemento de atracción hacia Santander vinculado a la Cultura en un espacio que será referente a nivel internacional en este ámbito".
De igual forma, ha explicado que "es un lujo para la ciudad contar con la firma de uno de los artistas más prestigiosos del momento para que nos ofrezca una nueva forma de ver y sentir los Jardines de Pereda con un espectáculo que nace y muere cada día con el objetivo de desarrollar sensaciones diferentes a través de la luz. Arte, emociones y creatividad se unen en esta propuesta, un adelanto de lo que ofrecerá en el futuro el Centro Botín".
Asimismo, Iñigo de la Serna ha añadido que, "con la propuesta de Carsten HÖller, Santander sigue sumando apellidos de prestigio internacional a su nombre ligados a la cultura que nos ayudan a proyectar la imagen de una ciudad cada día más abierta al mundo y que apuesta por la excelencia para ser recocida como una gran marca cultural".
'7,8 Hz', una instalación que el artista creó por primera vez para extender el efecto de la obra Light Wall I, (1999) en la Fondazione Prada en Milán, se activa secuencialmente en los Jardines de Pereda cubriendo cuatro zonas. Comienza en la zona de los Juegos infantiles y el estanque, se extiende a la zona del Monumento de Pereda, continúa en el área del templete, para terminar al final del nuevo túnel del Centro Botín, en el área del Monumento a Concha Espina. El apagado se realiza también de forma secuencial en sentido inverso.
Esta intervención ha sido posible gracias a la participación de INELCOM (www.inelcom.com), una compañía tecnológica con más de 30 años de experiencia en el mercado de equipos y sistemas electrónicos que ha que incorporado en las luminarias un programa informático de desarrollo propio, según las necesidades especificadas marcadas por el artista.