SANTANDER, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Educación, Francisco Fernández Mañanes, ha recalcado que la encuesta que se va a hacer llegar a toda la comunidad educativa, tiene como finalidad evaluar si se están alcanzando los objetivos pedagógicos que se persiguen con el nuevo calendario escolar -la mejora del bienestar y rendimiento del alumno y del clima escolar-. "Se trata sencillamente de una evaluación, no es un referéndum", ha puntualizado.
El titular de Educación ha salido así al paso de las críticas que han surgido en torno a esta encuesta. Fernández Mañanes ha dicho que le "sorprende" que genere polémica, en primero lugar porque "así se ha venido haciendo" y en segundo lugar, porque desde tu toma de posesión anunció su intención de evaluar los efectos del calendario.
Fernández Mañanes ha añadido que la evaluación es "relevante" para ver si se están cumpliendo los objetivos y en qué medida, y ha recalcado que "si no es así, sería una irresponsabilidad enorme por parte de la administración persistir en el error y no proceder a una reconsideración". Lo que a su entender "no es relevante" es dar a conocer el contenido del cuestionario.
En todo caso, el consejero ha puntualizado que el calendario del próximo curso se negociará como siempre con los sindicatos docentes en el seno de la mesa sectorial. Fernández Mañanes ha aclarado que "ha dicho en todo momento que está de acuerdo con el calendario escolar en su configuración como bimestres" porque le parece "una forma más racional" de alternar el trabajo en las aulas con los descansos.
Sin embargo, ha explicado que desde el comité de directores el primer descanso -el del 1 de noviembre- se considera "excesivamente" prematuro" y es "casi unánime" la opinión de que el último descanso del curso -el de la semana del 1 de mayo- puede suponer un "inconveniente" para los alumnos de segundo de Bachiller, que acaban a los pocos días el curso y se juegan el posible acceso a la universidad.
El consejero ha dicho que si los resultados de la encuesta pusieran de manifiesto "un rechazo absoluto" al nuevo calendario, "es obligación de todos reconsiderar las medidas que se han adoptado; y si lo que hay son "pareceres distintos", habrá que tener en cuenta esas consideraciones en el seno de la mesa sectorial y "plantearnos honestamente si cabe alguna rectificación en algún aspecto".
Sobre las acusaciones de partidismo, Fernández Mañanes ha dicho que "desconoce por completo si una simple evaluación interna de un programa educativo puede producir un determinado rédito político; otra cosa serán las medidas que se tomen a posteriori en función de los resultados de la evaluación", ha señalado a preguntas de la prensa.