SANTANDER, 31 May. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Personal y el comité de empresa del Gobierno de Cantabria y los trabajadores del Centro de Atención a la Dependencia (CAD) de Sierrallana han convocado movilizaciones para este viernes, 2 de junio, y el próximo jueves, día 8, así como una huelga para el día 15, para forzar al Gobierno de Cantabria a "reconsiderar su postura" y no trasladar a ningún residente de este centro a la Fundación Asilo de Torrelavega.
En concreto, los trabajadores del CAD de Sierrallana realizarán este viernes una concentración de 9.30 a 10.30 horas frente a la sede del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS) y posteriormente se manifestarán por las principales calles de Santander hasta llegar a la sede del Ejecutivo regional donde, junto a delegados del comité y la Junta de Personal, se concentrarán de 12.00 a 13.00 horas.
Esta concentración frente la sede del Gobierno de Cantabria en la calle Peñaherbosa se repetirá el jueves 8 de junio, a partir de las 9.00 horas, coincidiendo con la celebración del Consejo de Gobierno, mientras que para el 15 de junio ha convocado una huelga de los trabajadores del CAD.
En esa jornada, la huelga se desarrollará en los tres turnos laborales (mañana, tarde y noche). Además, en el turno de mañana los trabajadores se concentrarán en la entrada de las instalaciones del centro de 8.30 a 10.30 horas; en el de tarde de 15.00 a 17.00 horas; y en el de noche de 22.00 a 24.00 horas.
El presidente de comité de empresa (CCOO, UGT, SIEP, CSIF y TÚ), Carmelo Renedo, y el de la Junta de Personal, José Luis del Barrio, acompañados de varios delegados de ambos organismos de representación, han dado a conocer este miércoles en una rueda de prensa las movilizaciones y la huelga que han decidido llevar a cabo.
Han denunciado nuevamente que la Consejería de Política Social, que dirige la vicepresidenta regional, Eva Díaz Tezanos, y el ICASS, con Felisa Lois al frente, están mezclando la solución a una plaga de termitas y unas "futuribles obras" en las instalaciones para justificar el traslado de 24 de los 96 residentes durante un plazo de dos años a la Fundación Asilo de Torrelavega.
"Tanto el comité de la empresa como la junta de personal, los profesionales del centro y los familiares de los residentes nos negamos a este traslado porque creemos que es innecesario", ha enfatizado Renedo, que ha acusado al Gobierno de actuar "con oscurantismo" en este asunto.
De hecho, ha denunciado que se está "jugando al gato y al ratón" con los sindicatos y los trabajadores quienes se concentraron el miércoles de la pasada semana en el centro porque les hicieron creer que ese día se trasladaría a los residentes pero "hoy seguimos sin saber cuándo" se producirá.
Ante este "oscurantismo" y falta de información, se han convocado esas movilizaciones con las que también se busca forzar al Gobierno a "reconsiderar su posición y determinar no sacar ningún residente" del CAD de Sierrallana. "O lo deja sin efecto o seguiremos con más movilizaciones", ha advertido el presidente del comité.
En caso de que no se dé marcha atrás, Renedo ha destacado que continuaría la "incertidumbre" de cuándo procedería el ICASS al traslado de esos residentes y es que, ha denunciado, es un proceso que se está desarrollando de "manera oscura, nada transparente y con el mayor ocultismo".
Además y frente a los "globos sonda" que emiten la vicepresidenta regiona y la director adel ICASS para "confundir a la opinión pública", ha asegurado que ni los sindicatos ni los trabajadores ni los familiares de los residentes están de acuerdo con ese traslado, que consideran "innecesario".
"Es una decisión política con oscuros intereses para sacar los residentes a una entidad privada, con unos costes "desorbitados" de unos 4.000 euros por plaza al mes, y basándose en una plaga de termitas y unas obras que, por el momento, no son nada", ha criticado Renedo.
Por ello, tanto Renedo como Del Barrio ha considerado que todo esto puede llevar a una reducción de la plantilla del CAD de Sierrallana, que cuenta con 176 trabajadores. Y es que, han evidenciado, nadie entendería que se mantuviese la misma plantilla con 24 residentes menos durante dos años por unas "supuestas obras".
"Tras más de dos años, ¿quién nos aseguraría que esos residentes van a volver?", se han preguntado, al tiempo que han tachado de "excusa" la plaga de termitas cuando el tratamiento para acabar con ellas desde Sanidad se indica que es inocuo para las personas, es decir, que no obliga al traslado de los residentes. "Detrás de todo esto, está un recorte de personal por mucho que el ICASS y el Gobierno quieran disfrazarlo", han concluido.