La primavera entra con lluvias y nevadas tras un invierno seco y cálido

Presentación pronóstico primavera Aemet Cantabria
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 21 marzo 2017 14:06

Se esperan precipitaciones en forma de nieve el jueves y sábado

SANTANDER, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

La primavera comienza este año con lluvias y algunas nevadas, también en Cantabria, que caerán en los próximos días en zonas altas de montaña, especialmente este próximo jueves, 23 de marzo, y el sábado, día 25.

Las precipitaciones, normales para esta época del año, acompañarán a un tiempo que sigue siendo anticiclónico, y con el que se deja atrás un invierno que en términos generales ha sido cálido y seco o muy seco en la región, con temperaturas medias por encima de lo normal (seis décimas) y valores hidrológicos por debajo (253 mm, que no llegan al 75% de lo esperado).

Los datos del invierno que ha finalizado, y que también ha sido cálido y seco en España, y los pronósticos de la primavera que acaba de comenzar (entró el lunes 20) los han hecho este martes el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en Cantabria, José Luis Arteche, y Juan José Rodríguez, miembro de la AEMET.

ARRANQUE DE LA PRIMAVERA

En rueda de prensa, han señalado que el tiempo sigue siendo anticiclónico, aunque de cara al fin de semana se esperan bajas presiones y viento del Norte o Nordeste que dejará precipitaciones sobre el Cantábrico, donde lloverá de forma alterna. Además, se espera alguna nevada, de cara al fin de semana, en zonas elevadas, como Alto Campoo.

Más a largo plazo, para los próximos meses de abril, mayo y junio, se prevén temperaturas con valores superiores a los normales, a los registrados de media en el periodo 1981-2010, por lo que la primavera será "un poco" más cálida de lo habitual.

En cuanto a las precipitaciones, no se espera que sean significativas en ninguna zona del país, lo que se sumaría a lo ocurrido en el último trimestre y con el que se han enlazado tres periodos secos consecutivos (verano, otoño e invierno), algo que si bien no es "habitual" tampoco es "excepcional".

Esto refleja que "hay poco agua en el suelo" y que "todavía queda bastante por llover para alcanzar valores normales", han apuntado los portavoces de la AEMET. Y, en cualquier caso, enlazar nueve meses secos no quiere decir que los tres siguientes también vayan a serlo.

Pero si la primavera de 2017 no es lluviosa (la última estación húmeda fue la primavera de 2016 por las precipitaciones caídas en marzo) se mantendrá el déficit hidrológico actual, déficit que en el mes de febrero se situaba en el 28 por ciento respecto a los valores previstos dentro del año hidrológico (que transcurre de octubre a octubre).

EL SEXTO INVIERNO MÁS SECO DESDE 1981

Y es que el último invierno ha sido el sexto más seco desde 1981, y también ha sido cálido, aunque menos que hace un año, cuando las temperaturas medias fueron incluso superiores.

Mes a mes, diciembre fue "muy cálido" (con 9,5 ºC de media, un 1,4 ºC más) y "muy seco" (31 mm, el 25% de lo normal); enero "muy frío y húmero"; y febrero "cálido y normal".

Por fenómenos concretos, solo enero tuvo rasgos invernales, aunque las precipitaciones estuvieron acompañadas de temperaturas altas para esta época del año y el frío llegó en un ambiente seco.

Además, no se registraron nevadas importantes, tan solo un episodio en el primer mes, con precipitaciones escasas y únicamente en zonas altas de montaña.

Tampoco hubo episodios excepcionales de precipitaciones elevadas, al margen, por ejemplo, de algunos destacados en Soba y Villacarriedo, donde el 10 de enero cayeron más de 76 litros por metro cuadrado, lo que coincidió en el tiempo con los temporales registrados a mediados de mes.

También hubo alertas en el mar, por fuerte oleaje y viento, sobre todo a principios y finales de febrero. Sin embargo, las mayores rachas este invierno se registraron en zonas de montaña, en Alto Campoo y Tresviso, con respectivamente 138 kilómetros por hora el 3 de febrero y 136 km/h el día 13 del mismo mes. Pero por lo general, ha sido un invierno poco ventoso en Cantabria.

TEMPERATURAS POR ENCIMA DE LO NORMAL Y AMBIENTE SOLEADO

En cuanto a las temperaturas, las mínimas se correspondieron con valores "moderadamente bajos" aunque no hubo "grandes" valores negativos, salvo algunos días en zonas del interior como Valderredible o la Cantabria del Ebro, donde el termómetro marcó por debajo de los 0 grados.

Los ejemplos más significativos son los -12,4 ºC y los -11,5 ºC anotados el 7 de enero en Cubillo del Ebro y Polientes. El mercurio también descendió de los -10 ºC los días 1 y 19 de enero, en Nestares y Alto Campoo.

Por su parte, las temperaturas máximas del invierno en Cantabria estuvieron más repartidas, entre días y zonas, y alcanzaron valores "bastante significativos". Así, destacan registros de más de 22 ºC en Castro Urdiales (31 de enero) y Terán (1 de febrero); o de más de 21 ºC en San Felices de Buelna, Ramales, Torrelavega y Santander (5 de diciembre), Polientes (22 de febrero), Parayas (31 enero) o Cubillo del Ebro (22 de febrero).

Con todo ello, las temperaturas máximas han alcanzado valores "por encima de lo esperado", especialmente en diciembre y febrero, mientras que las mínimas también han estado por encima de valores normales, y solo en enero se han registrado valores por debajo de lo habitual.

Además, diciembre y febrero han destacado por abundante insolación, con más horas de solo de lo normal en estos meses. En general, el invierno fue un 30% más soleado de lo habitual en esta estación.

DÍA MUNDIAL METEOROLOGÍA

Para finalizar, los representantes de la AEMET en Cantabria han recordado que este 23 de marzo se celebra el Día Mundial de la Meteorología, bajo el lema 'Entendiendo las nubes', y han señalado también que este año las monjas clarisas de Villaverde de Pontones recibirán uno de los tres galardones que se entregan a nivel nacional por colaborar con esta Agencia.