Dice que la negociación con los sindicatos "va bien" y espera que se pueda aprobar esta semana
SANTANDER, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cantabria y líder del PRC, Miguel Angel Revilla, espera contar con el apoyo del PP como principal partido de la oposición para el plan de choque diseñado por el Gobierno para hacer frente a la crisis del Covid-19. Revilla considera que la negociación con los sindicatos "va bien" y espera que se pueda aprobar "esta misma semana".
También espera el apoyo de Ciudadanos, a la vez que descarta el de Vox. "Me gustaría pero no va a haber unanimidad, ni aquí -en Cantabria- ni en España", ha dicho Revilla, quien se ha dirigido especialmente al PP, partido que hace años gobernó en coalición con el PRC y después en solitario con mayoría absoluta, y que es "la alternativa en España al Gobierno actual".
Revilla ha explicado que por las "conversaciones fluidas" que mantiene con la presidenta del PP, María José Sáenz de Buruaga, espera que entiendan que el plan de choque es "imprescidible".
En todo caso, ha precisado que el plan que se ha presentado a los agentes sociales en la mesa de diálogo social y a los grupos políticos en el Parlamento es un "reajuste de partidas" del presupuesto, y que después habrá que hacer otro plan, "el importante" con recursos procedentes de Europa y de España o del endeudamiento "si se nos autoriza".
Revilla se ha ofrecido a "sentarnos a redactar ese plan entre todos los partidos, y muy especialmente con el PP, y Ciudadanos también".
El presidente ha defendido que el Gobierno no tenía la obligación de someter el plan de ajuste a consulta puesto que tiene una mayoría holgada en el Parlamento.
"La negociación con los sindicatos va bien; vamos a ver con los empresarios", ha dicho después de que la CEOE haya decidido no acudir a la reunión de la mesa de diálogo social convocada para este domingo.
A la pregunta de si serán suficientes los 52 millones que las diferentes consejerías han aportado solidariamente al fondo sanitario para luchar contra el Covid-19, el presidente ha respondido que espera "no tener que quitar ya nada de ningún sitio porque hemos dejado un presupuesto de mínimos".