SANTANDER, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
Santander ha rendido este domingo homenaje a todas las víctimas del terrorismo al cumplirse 25 años del atentado de ETA en La Albericia en el que perdieron la vida Julia Ríos, su esposo Eutimio Gómez, y Antonio Ricondo.
La hija del matrimonio, Silvia Gómez Ríos, y un primo de Antonio Ricondo, Pedro Terán Ricondo, junto con la alcaldesa, Gema Igual, han descubierto una placa, en el monumento erigido en el lugar del atentado en memoria de los fallecidos aquel 19 de febrero de 1992 cuando un coche bomba explotó al paso de un furgón policial matando a tres personas y dejando una veintena de heridos.
Tras el descubrimiento de la placa con la frase: 'La ciudad de Santander en memoria de Julia Ríos, Eutimio Gómez y Antonio Ricondo, asesinados por la banda terrorista ETA el 19 de febrero de 1992. En homenaje y recuerdo de todos aquellos que sufrieron la violencia bárbara y cruel del terrorismo', han colocado una corona de laurel junto al monumento.
La alcaldesa ha afirmado que Julia, Eutimio y Antonio "son quienes nos empujan hoy a lanzar un grito silencioso de rechazo rotundo en contra del terrorismo" y ha instado a los ciudadanos a no olvidarse de ellos y a decir, "en su nombre, alto y claro que el terrorismo, sea del signo que sea, no tiene lugar en nuestra sociedad".
Igual ha trasladado la repulsa de todos los asistentes hacia los actos de violencia y hacia quienes los perpetran, los amparan o los defienden y ha advertido: "nadie va a poder imponernos el miedo. Nadie nos va a quitar la libertad. Nadie va a apoderarse de nuestras vidas".
La regidora santanderina ha instado a los ciudadanos a mostrar una postura "firme y unánime" en defensa de los valores de nuestra sociedad, de la democracia, del Estado de Derecho, de la libertad, de la seguridad de todos, de la democracia y del derecho a vivir en paz.
"Para eso estamos hoy aquí, para -como dice la placa que acabamos de descubrir- rendir 'homenaje y recuerdo a todos aquellos que sufrieron la violencia bárbara y cruel del terrorismo', y también para defender nuestra libertad y los valores democráticos de una sociedad civilizada como la nuestra, que está radicalmente en contra de cualquier tipo de violencia", ha subrayado.
Igual ha señalado que Silvia, la hija de Julia y Eutimio, es "testigo de primera mano" de la "devastación personal" que arrastra tras de sí el terrorismo, de las consecuencias que deja en quienes pierden a su familia y una muestra "palpable" de la "injusticia de la barbarie terrorista", como lo son también los familiares de Antonio Ricondo, a quien ETA le arrebató su vida con solo 28 años.
"Aunque me esforzara, seguro que nunca encontraría las palabras que lleguen a definir ni siquiera mínimamente lo que ha supuesto para todos ellos lo que para los demás fue un cruel acto de terrorismo que conmocionó a Santander y a toda España, en un momento en el que ETA estaba plenamente activa y que iba sembrando de asesinatos muchas ciudades de nuestro país", ha reconocido.
En este sentido, ha recordado que eran los años en los que el terrorismo de ETA ocupaba "el primer lugar" entre las preocupaciones de los españoles, en los que los informativos se "llenaban" de noticias de atentados y de secuestros, "en los que, quien más o quien menos, sintió de cerca el temor o el rastro infame del terrorismo".
"Unos años que algunos tienen casi olvidados pero que no debemos dejar que se borren de nuestra memoria. Porque España sufrió como pocos países la barbarie terrorista y no podemos consentir que se repita. La sociedad española y la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado consiguieron derrotar a ETA y, como ciudadanos, debemos sentirnos enormemente orgullosos de haberlo logrado", ha sentenciado.
ETA YA NO MATA, PERO NO SE DISUELVE
Por su parte, Javier Rodríguez, exdelegado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo en Cantabria, ha señalado que, aunque "ETA hoy no mata, tampoco se disuelve, no extorsiona pero está en las instituciones manejando un importante presupuesto".
"Sus pistoleros salen de la cárcel sin arrepentimiento, sin cumplir íntegramente el máximo de la pena y sin colaborar en el esclarecimiento de más de 300 crímenes pendientes de resolver", ha añadido.
Rodríguez ha hecho hincapié en que, entre las víctimas, "nunca ha habido ni tan siquiera un conato de buscar la justicia por su mano", siempre han confiado en la Justicia y en el Estado de Derecho.
"Por eso nos duele tanto ver día sí y día también la salida de la cárcel de los asesinos de nuestros seres queridos, de los que nos destrozaron las vidas y ver cómo se les hacen homenajes en sus pueblos como si fueran héroes, cómo se les entrevista en las radios y televisiones como si su opinión fuera trascendental, cómo a su portavoz se le tilda de hombre de paz cuando ha cumplido condena por actividad terrorista, cómo se subvenciona desde las instituciones a asociaciones afines a sus interés", se ha lamentado.
El representante de las víctimas del terrorismo ha apuntado que hubo muchos héroes, como Julia, Eutimio y Antonio, o Benito Sainz y Francisco Vega, que resultaron heridos graves en ese atentado, a quienes la sociedad no puede defraudar, ni a "los que dieron su vida por su país y por la libertad de todos".
Rodríguez ha alertado de que, ahora que han sido derrotados judicialmente, los terroristas y quienes les apoyan tratan de "limpiar la Historia". "Tratan de hacer pasar a los que trataron de imponer la ideología del terror por políticos demócratas de toda la vida, a verdugos por víctimas, a delincuentes por hombres de paz. Flaco favor nos haríamos como sociedad si se lo permitimos hacer. Nos jugamos mucho, hay que impedir que tergiversen la Historia, que sigan inoculando su odio en las nuevas generaciones de jóvenes", ha recalcado.
El exdelegado de la AVT en Cantabria ha recordado, además, parte de una carta que escribió Silvia al asesino de sus padres, con las siguientes palabras: "por un momento trato de ponerme en tu lugar y si yo hubiera matado a tus hijos y estuviera arrepentida no solo sabría sus nombres, me habría interesado por saber qué fue de sus vidas y en qué podría ayudar.
Pero claro, tú y yo no tenemos nada que ver. Yo jamás habría podido arrebatarte lo que tú más quieres en tu vida. Ni a ti ni a nadie. Ni con tres vidas que vivieras, cumplirías tu condena".