Anuncia que no destinará dinero a cooperación internacional y que sólo financiará las plazas ocupadas en centros de mayores y menores
TOLEDO, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha anunciado este jueves que sólo van a percibir ayudas sociales aquellas personas o familias con las rentas más bajas y que se va a examinar el baremo aprobado por el Gobierno central con relación a los grados de la dependencia.
Se trata de algunas de las medidas que adoptará la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales y que están contenidas en la segunda parte del Plan de Garantías de los Servicios Sociales, con el que Cospedal pretende ahorrar 350 millones de euros, cantidad que se suma a los 1.815 millones de ahorro que preveía la primera parte.
"Si queremos proteger a los más débiles y a aquellos que más necesitan tenemos que hacer sacrificios de forma temporal", ha indicado la presidenta castellano-manchega cuando se ha dispuesto a enumerar las medidas referidas al capítulo de asuntos sociales.
Dicho esto, ha concretado que en el sistema de prestaciones sociales sólo van a recibir ayudas aquellas personas y familias con las rentas más bajas siempre y cuando no reciban ayudas públicas que sean "incompatibles", con el objetivo de "dar buen uso a los recursos de todos los ciudadanos de forma prioritaria y de forma solidaria".
Según Cospedal, "no nos podemos permitir ayudas a familias con rentas altas y no nos podemos permitir tarjetas naranjas o tarjetas verdes para el transporte que no estén vinculadas a necesidades sociales básicas". "Lamentablemente nos lo hemos permitido desde hace mucho tiempo sin posibilidades de pagar", ha señalado.
A su juicio, en la situación económica actual "no nos podemos encontrar situaciones de familias y de personas con rentas altas que tienen el acceso a servicios públicos, que no son esenciales, de forma totalmente gratuita".
En relación con los centros de mayores, menores, de personas con discapacidad o de dependencia, Cospedal ha anunciado que su Gobierno va a financiar las plazas ocupadas, "no las reservas de plaza" y, de acuerdo con las instrucciones del Gobierno central, se va a examinar el baremo aprobado por el Ejecutivo central con relación a los grados de la dependencia.
COOPERACIÓN INTERNACIONAL
Tras enumerar estas medidas, Cospedal ha asegurado que el compromiso que tiene la sociedad de Castilla-La Mancha con los más pobres "siempre" va a estar vigente, "pero hoy nos es imposible asumir obligaciones que supongan la necesidad de incrementar el endeudamiento de la región que vayan vinculadas a políticas cuantitativas de gasto en materia de cooperación internacional".
"No nos podemos permitir pedir créditos y pagar intereses por importe de 40 millones de euros para hacer cooperación internacional", ha especificado.
Todas estas medidas, más las referidas a sanidad, suponen en la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales un ahorro de 834 millones de euros para 2012, que se suman a los 103,6 que ya se han ahorrado en el año 2011, "sin hablar de ninguna formula de copago", ha querido remarcar.
Cospedal entiende que antes de pedir a los ciudadanos nuevos esfuerzos en forma de algún tipo de tasa o de impuesto es necesario demostrarles que el Gobierno regional es capaz de ahorrar hasta el "último céntimo" en hacer "auténticos esfuerzos de austeridad" con sus propios medios garantizando la sanidad y la educación pública.