ALBACETE, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Bienservida (Albacete), de donde eran naturales la mujer y la hija asesinadas presuntamente por su pareja en Daimiel (Ciudad Real), ha decretado cuatro días de luto oficial, y la bandera del Consistorio luce a media asta, uniéndose de este modo al dolor por la muerte de sus paisanas, que serán enterradas esta tarde, a las 16.00 horas, en la Iglesia parroquial de San Bartolomé.
Así lo ha confirmado a Europa Press su alcalde, Manuel Sánchez Ruiz, que ha agradecido el cariño y apoyo de todo el pueblo mostrado en la concentración que ha tenido lugar a las 12.00 horas de este martes en la plaza de la Constitución. "Todo el pueblo se ha reunido allí", ha asegurado el regidor, e incluso "he visto vecinos de municipios limítrofes".
"Nos sentimos destrozados; nunca piensas que algo así te vaya a tocar tan de cerca; son momentos muy difíciles para todo el pueblo". Y, es que una de las fallecidas, la joven de 18 años había vivido en Bienservida hasta hace tres años. "Aquí, en el pueblo, ha realizado sus estudios y en el Instituto de Educación Secundaria ha cursado la etapa de Bachillerato", ha relatado el regidor.
Hace tan solo ocho días, madre e hija viajaban hasta el municipio para visitar a la abuela de la niña y madre de la mujer asesinada. "Estuvieron aquí, comieron en el restaurante con la abuela. Quién iba a pensar en este desenlace", ha lamentado el alcalde.
Manuel Sánchez ha insistido en la necesidad de buscar algún tipo de solución a estas trágicas situaciones que se siguen cobrando vidas de mujeres en el país de manera constante. "Son ya 11 las mujeres asesinadas en toda España" y, en su opinión, se tiene que lograr entre todos, desde la educación.
"Tenemos que mamar desde pequeños el respeto hacia la vida y hacia las personas", ha señalado, para asegurar que "es importante que las mujeres maltratadas puedan alertar de cuál pueda ser su situación como primera medida de prevención".
El entierro tendrá lugar esta tarde, a las 16.00 horas, en la iglesia parroquial de la localidad, y se espera la asistencia de los más de 600 vecinos que viven en el municipio que vio nacer a las dos nuevas víctimas de violencia de género.