TOLEDO 13 May. (EUROPA PRESS) -
Las excavaciones del yacimiento arqueológico de Vega Baja de Toledo siguen aportando interesantes datos sobre la antigua capital del reino Visigodo e información de una de las etapas más desconocidas de nuestra historia. Así, en los últimos días, los arqueólogos han concluido del desenterramiento de lo que podría ser un gran depósito de almacenamiento de agua.
Dicho depósito, ha informado Toletum Visigodo en nota de prensa, se encuentra situado en el centro del espacio abierto empedrado en el que se viene trabajando desde la campaña del año pasado. Esta estructura --visible desde la Avenida de Carlos III-- es de forma circular, de unos 5 metros de diámetro y con una profundidad de 1,5 metros respecto al nivel del pavimento.
Aunque su análisis e interpretación está en proceso de estudio -es la primera estructura de estas características de la que se tiene constancia- resulta obvia la intencionalidad de su construcción, pudiendo estar relacionada con la acumulación de agua, ya sea como vaguada para recoger y evacuar la acumulación de lluvia del espacio central o como estructura contenedora de agua con otros fines.
Una de las evidencias que denotan la importancia de este elemento es la presencia de un camino con unas considerables dimensiones (--dos metros de longitud, por dos metros de ancho-- que comunica esta estructura hidráulica con otros espacios urbanizados anexos, donde se han podido localizar diversas estructuras murarias que forman parte de varios complejos constructivos.
Según los arqueólogos de Vega Baja, los muros de estas edificaciones están realizados con una técnica constructiva consistente en cimentación y zócalo, ejecutados mediante mampostería careada y alzado resuelto con tapial. Se conservan en algunas zonas hasta 1,50 metros de altura de su trazado original.
Es aquí donde han aflorado construcciones de planta rectangular. Se trata de varios edificios muy similares, con más de 30 metros de longitud y 10 metros de ancho, que se articulan en torno a un espacio abierto de unos 900 metros cuadrados, pavimentado con cantos de río.
Como resultado de estos meses de excavación, se está documentando un urbanismo regular y planificado que afectaría a este entorno ubicado fuera del recinto amurallado del casco urbano, otorgando a Vega Baja una fisonomía diferente respecto a la anterior ocupación tardoantigua, fenómeno que también se confirma en otras ciudades de época visigoda como en Mérida (área arqueológica de Morería) y Córdoba (yacimiento de Cercadilla).
Este nuevo desarrollo urbano que experimenta Toledo, sobre todo a partir de mediados del siglo VI D.C., se tiene que entender dentro del contexto histórico de la elección de la ciudad Toletum, como centro político y religioso en época visigoda.
JORNADAS DE PUERTAS ABIERTAS
Los nuevos descubrimientos son los que se están mostrando y explicando directamente por los arqueólogos a los ciudadanos que se acercan al yacimiento en la tercera edición de las Jornadas de Puertas Abiertas.
Las visitas guiadas tendrán lugar hasta el día 28 de mayo, de jueves a sábado, según el siguiente horario: jueves y viernes de 10.00 a 14.00 horas, y sábados de 11.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 19.00 horas y que, a diferencia de anteriores ediciones, los visitantes no tendrán que realizar cita previa.
Podrán acceder libremente al campo arqueológico situado entre la Avenida de Carlos III (Puerta de Sabatini) y la tapia de la Antigua Fábrica de Armas. Los recorridos por la excavación se realizan cada media hora en los horarios reseñados.