TOLEDO 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, se ha comprometido a no recortar "lo más mínimo" los servicios sociales que dependan directamente del Ayuntamiento y ha avisado al Gobierno de Castilla-La Mancha que él mantendrá "todo lo posible" los servicios públicos de la ciudad con el "esfuerzo municipal", pero que no se hará cargo de los que no son de su competencia.
"Nos acomodaremos a las competencias que tiene legalmente los ayuntamientos", ha destacado el alcalde a preguntas de los medios durante la inauguración del Centro del Agua de Palomarejos. "En lo demás, me tengo que ajustar a lo que me digan los servicios jurídicos y económicos", ha destacado.
García-Page ha reaccionado de esta manera al conocerse que el Gobierno de Cospedal tiene la voluntad de no continuar con algunos de los convenios relacionados con prestaciones de servicios sociales, decisión que dejará en la calle a una docena de trabajadores en Toledo.
El alcalde se ha mostrado "extraordinariamente preocupado y disgustado" tras recibir una comunicación por parte del Gobierno de Cospedal comunicando que "cortan el suministro" un día antes de que acaben los plazos.
Lo que "más le molesta" al alcalde es que el Gobierno de Castilla-La Mancha, que lleva siete meses "en teoría" gobernando, no se haya sentando a negociar con el Ayuntamiento si su intención era "recortar, replantear o reformular" la prestación de los servicios.
"Han desperdiciado siete meses para habernos sentado, haber hablado, haber podado lo que hubiera que podar, pero haber mantenido puestos de trabajo y, sobre todo, haber mantenido la palabra que le han dado los ciudadanos, que era que no se iba a resentir lo social, y hasta ahora lo único que se resiente es lo social", ha dicho.
Con esta actitud, ha asegurado, el Gobierno de Cospedal "está metiendo a los ayuntamientos en un precipicio y un pozo verdaderamente amargo".
"La gente tiene que saber que ni nos han llamado para negociar antes de las elecciones, han esperado a que pasen todas las elecciones posibles y el último día de plazo se han descolgado con una carta dejándonos literalmente tirados a los ayuntamientos, y con ello obligándonos a rescindir contratos", ha denunciado.
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