ALBACETE 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Albacete ha condenado a dos hombres, R.G.G. y M.G.G., a dos años y nueve meses de prisión por considerarlos autores de un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de amenazas.
La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, estipula que la pena la cumplirán internados durante ese tiempo en un centro especial adaptado a su patología.
Según la misma, ha resultado probado que el 29 de diciembre de 2013, sobre las 19.15 horas, los acusados, hermanos, acudieron a casa de otro de sus hermanos, en Hellín (Albacete), y cuando salió a atender la llamada de la puerta, le empujaron fuertemente y entraron hasta la cocina.
Una vez en ella, lanzaron una botella contra el cristal de la puerta, mientras hablaban entre ellos sobre la forma en la que lo iban a matar. Cada uno de los acusados cogió un cuchillo de la cocina, y el acusado M.G.G. le golpeó en la cabeza mientras R.G.G. le cortó la coleta que llevaba.
Lo sentaron en una silla y le amenazaron con los cuchillos pero en ese momento llegó un primo de los acusados, alertado por los ruidos, y les recriminó su actitud, a lo que los acusados lo sentaron en otra silla de la cocina y le pusieron un cuchillo en el cuello amenazando con matarle.
Mientras M.G.G. tenía al primo en el suelo, amenazándolo de muerte con un cuchillo, R.G.G. puso el cuchillo jamonero a la altura del cuello de su hermano.
Entonces, con intención de agredirle en el abdomen y afectar a sus órganos vitales para acabar con su vida, le pinchó sin lograr finalmente su propósito porque, dada la longitud del cuchillo jamonero, la hoja se dobló al impactar con una chaqueta gruesa que vestía la víctima.
Ante eso, le pidió a M.G.G. que le diera un cuchillo más recio, pero iniciaron una discusión y nuevamente el acusado R.G.G., tras enderezar la hoja doblada, intentó agredir en el abdomen a su hermano con el mismo cuchillo jamonero, sin lograr su propósito.
En ese momento, M.G.G. acercó otro cuchillo a la cara del primo y le amenazó con vaciarle el ojo, a la vez que le propinaba varios puñetazos en la cara.
Los acusados no consiguieron finalmente su propósito porque entraron en el domicilio otro hermano de los acusados y una persona más y, por el miedo a poder ser descubiertos, cesaron en su actitud y abandonaron el domicilio.
Como consecuencia de la agresión, el hermano agredido sufrió heridas en la mejilla izquierda y el labio superior, así como erosiones en la zona cervical, de las que tardó en curar cinco días, uno de ellos de baja.
En el momento de los hechos, R.G.G. presentaba un trastorno esquizoparanoide de personalidad y dependencia a heroína y cocaína que afectaba gravemente sus capacidades intelectivas y volititivas sin llegar a anularlas.
Por su parte, el procesado M.G.G. presentaba un trastorno de dependencia a opiáceos, capacidad intelectual límite y esquizofrenia paranoide, que disminuían sus capacidades volitivas e intelectivas sobre los hechos, sin llegar a anularlas.
Los acusados se encuentran en prisión por esta causa desde el 30 de diciembre de 2013.