TOLEDO, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno regional, a través de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, ha presentado observaciones a los documentos iniciales del ciclo de planificación hidrológica 2021-2027 correspondientes a las demarcaciones del Tajo, Segura, Guadiana y Júcar, con el objetivo común de defender los intereses hídricos y salvaguardar los ecosistemas de Castilla-La Mancha.
Las observaciones realizadas por la Agencia del Agua, entidad dependiente de la Consejería de Fomento, ponen de manifiesto las carencias en cuanto al estudio medioambiental de la demarcación y el empleo de indicadores adecuados para su evaluación, ha informado la Junta en nota de prensa.
En este sentido, entre los argumentos técnicos esgrimidos "se echa en falta en los documentos la toma en consideración de la recuperación de costes medioambientales", ha explicado el director gerente, Antonio Luengo. También ha señalado la necesidad de abordar un estudio más detallado de las implicaciones del cambio climático en la planificación hidrológica.
Asimismo, en las observaciones se han planteado otras cuestiones, tales como la necesidad de modernizar regadíos tradicionales o la necesidad de mantener un volumen de existencias en los embalses para la lucha contra los incendios forestales.
Como ha explicado Luengo, hay observaciones específicas para cada demarcación, así en la del Tajo se citan las recientes sentencias del Tribunal Supremo que impiden seguir postergando el cumplimiento de los objetivos medioambientales y obligan a implantar un régimen de caudales ecológicos en el río Tajo. "Para ello es necesario modificar de manera inmediata la regla de explotación del trasvase Tajo-Segura, elevando el umbral no trasvasable y aumentando los desembalses desde cabecera", ha incidido.
También en relación con el trasvase, se ha hecho una observación sobre que los documentos no consideran el trasvase como presión de la demarcación del Tajo, a pesar de ser la extracción más significativa que soporta la cuenca.
OBSERVACIONES A LA DEMARCACIÓN DEL SEGURA, GUADIANA Y JÚCAR
En cuanto a las observaciones referidas a la planificación de la demarcación del río Segura inciden en primer lugar en la necesidad de transitar hacia un modelo sostenible de gestión de los recursos hídricos. Los documentos tramitados por el Ministerio "se limitan a dar una patada adelante" a los problemas crónicos de la demarcación, agravándolos incluso", ha apuntado Antonio Luengo. "En su lugar, desde la Agencia del Agua proponemos ir dando pasos decisivos hacia la reducción de la presión sobre los recursos hídricos, que actualmente alcanza valores inasumibles", ha remarcado.
Las necesidades de abastecimiento de la demarcación deben atenderse de forma prioritaria y con recursos de la propia demarcación, ha indicado, pues como ha añadido "es irreal seguir considerando el trasvase como la garantía para atender las necesidades de la cuenca. Por el contrario, es necesario eliminar la alusión al trasvase Tajo-Segura como solución al déficit hídrico de la demarcación".
En cuanto a los documentos del Júcar, la Agencia del Agua ha vuelto a insistir en el tema de las cuencas intracomunitarias, que siguen englobadas en la demarcación sin que se haga un análisis separado de las mismas.
También, sobre las normas de explotación del sistema Júcar, que siguen sin aprobarse a pesar de los años de retraso que acumulan, ha resaltado que "hemos recordado que estas normas son necesarias para definir los recursos excedentarios, cuya determinación debe hacerse con respeto a la prioridad de la cuenca cedente".
Además, ha apuntado que el documento no analiza la presión que supone el convenio de Alarcón para la masa subterránea de la Mancha Oriental y tampoco aprovecha al máximo los recursos de la desalación, necesarios para reducir las presiones actuales sobre las masas de agua.
Por último, en la demarcación del Guadiana, se ha apuntado la necesidad de profundizar y mejorar el conocimiento de los recursos subterráneos disponibles. En el mismo sentido, se ha precisado un mayor rigor en cuanto a la estimación de extracciones y consumos reales. Y para terminar, se ha indicado necesario evaluar la importancia socioeconómica del regadío en la demarcación.