TOLEDO, 12 Jun. (De Miguel Muñoz para EUROPA PRESS) -
Decenas de personas llevan días caminando por Castilla-La Mancha para visibilizar la causa saharaui. La primera edición de la Marcha por la Libertad del Pueblo Saharaui comenzó oficialmente el pasado 20 de mayo en Cádiz. La actividad cuenta desde entonces con diferentes columnas que parten desde toda España para terminar con un acto final en Madrid previsto para el 19 de junio.
La región forma parte de la Columna Este, que también tiene otro grupo que salió desde Alicante. El pasado 5 de junio se inició la marcha en la ciudad de Albacete. La primera parada fue La Gineta, a la que siguieron los días posteriores La Roda, Minaya, Villarobledo, Socuéllamos, Pedro Muñoz y Alcázar de San Juan.
Para este, sábado 12, los activistas llegarán a la laguna del Taray, en Quero. La siguiente etapa pasará por Villacañas, para de ahí moverse en tren hasta Aranjuez. Los últimos días, hasta llegar a la capital, los recorrerán por la Comunidad de Madrid. En total, serán 14 etapas con cerca de 190 kilómetros a pie.
María Porcel, actriz albaceteña y activista por el pueblo saharaui, fue a la persona a la que en el pasado mes de noviembre se le iluminó la bombilla para organizar esta reivindicación. Lo ideó, señala en conversación con Europa Press desde la propia marcha, por observar cierta "inactividad y pasividad" dentro del movimiento solidario con la causa saharaui.
"Nos metemos en el bucle de hacer siempre lo mismo y eso no funciona. Está muy bien acoger niños saharauis en verano, y me gusta. O mandar latas de atún. Pero eso son parches. La cosa tiene que venir de más arriba y que se vea. Y poner de manifiesto que hay una población civil que está apoyando a la población saharaui", comenta.
Ella es una de las 6 o 7 personas fijas que están participando de forma permanente en la caminata. Algunas personas hacen algún paréntesis debido a obligaciones personales y laborales. Otras se van uniendo en diferentes etapas.
"Eso te da mucha alegría porque ves que tiene su efecto. Sabemos que en otras zonas como el Norte hay muchas personas saharauis y solidarias con la causa. Aquí también, pero menos. De Villarrobledo salieron hasta 14 personas, con dos coches de apoyo sin parar de llevar agua fría o fruta. Es un gustazo y te da alegría", afirma.
El objetivo principal es visibilizar la causa saharaui lo máximo posible. Para ello, además de caminar, organizan algunas actividades en los finales de etapa. Por ejemplo, en Socuéllamos fueron recibidos por la alcaldesa, que convocó a los medios locales y firmó el manifiesto de la convocatoria. Otra gente se acerca a preguntar sobre el tema. "Por ejemplo, en Minaya la gente se interesó y un profesor de un colegio les contó la causa a sus niños al vernos pasar. Vas dejando huella y ves que hay más gente solidaria de la que nos pensamos a veces", señala.
En La Roda, donde hay mucha población saharaui, fueron también muy bien recibidos e hicieron por la tarde una concentración. Además, se dieron una vuelta por todo el pueblo para recoger firmas. En Villarrobledo se proyectó un documental y se hizo un coloquio. En el resto de municipios visitados también hay previstas concentraciones.
"DEUDA HISTÓRICA" Y "RESPONSABILIDAD ESPAÑOLA"
María Porcel tiene claro el mensaje a transmitir y la importancia de la lucha para la ciudadanía española. "Yo ahora mismo tengo cuatro ampollas, dos heridas, un talón hinchado y me duele y paso calor, pero al final a los saharauis les duele más su situación, pasan más calor desde hace 45 años. Y en los territorios ocupados no les duelen las ampollas, les duele el cuerpo y el alma con las violaciones de Derechos Humanos".
"Si hay que andar hasta Madrid, se anda. Y si hay que andar hasta Bruselas, se anda. Lo que haga falta porque esto ya no puede seguir así, es un asunto de deuda histórica, moral y de responsabilidad. A cada persona de este país le debería corresponder un tanto por ciento de este conflicto porque es nuestro y se lo debemos. A cada saharaui le debo una parte de su libertad. Como ellos tienen puesto en una pared en Bojador, la solidaridad es la ternura de los pueblos", comenta.
Por su parte, Mulay es un joven saharaui de 27 años que nació en los campamentos de población refugiada saharaui de Tinduf (Argelia). Como otros tantos, pasó varios veranos en una familia española gracias al programa Vacaciones en Paz. "Tuve una familia manchega residente en Andalucía que quiero muchísimo. Y ellos a mí y a toda mi familia. Les quiero dar las gracias desde aquí", explica.
Desde hace tres años vive de forma permanente en nuestro país, donde trabaja actualmente como montador de placas solares. Desde el primer día acompaña a la marcha desde Albacete aunque no vive allí. "Me pareció muy buena idea la marcha, me encantó. Vi que no había saharauis fijos en la marcha desde Albacete, decidí colaborar y dejarlo todo para participar en esta actividad por mi causa", afirma.
Para el joven saharaui, el contexto en el que se produce la marcha saharaui es muy relevante. La convocatoria estaba pensada ya desde antes que estallara la guerra abierta en noviembre entre Marruecos y el Frente Polisario, representantes del pueblo saharaui.
Más recientemente, el conflicto ha cobrado una nueva dimensión por la crisis diplomática entre Marruecos y nuestro país a causa de la situación en el Sahara, tal y como han admitido desde el propio país vecino. "Tenemos que aprovechar esto para que el Gobierno español abra los ojos y que encuentren la solución para que el Sahara sea libre", considera Mulay.
Todavía queda mucha gente sin conocer el conflicto o lo que significa el Sahara Occidental pese a que fue una provincia española más hasta el año 1975. Por eso, según los organizadores, siguen siendo importantes las actividades de este tipo. "Nos han preguntado varias personas sobre el tema porque no conocen el tema. Pasar por un sitio donde conocen el Sahara no es igual que pasar por una zona donde no saben nada del tema", destaca Mulay, quien insiste en agradecer a la sociedad civil española la organización de estas iniciativas para darle voz a su pueblo.
Entre otras cuestiones, el manifiesto de la marcha exige al Gobierno de España "coherencia y firmeza en su defensa de la legalidad internacional y el apoyo y respeto del legítimo derecho a la libertad del pueblo saharaui", así como "el reconocimiento formal del estatus diplomático del Frente Polisario, como único y legítimo representante de la República Árabe Saharaui Democrática".
La marcha concluirá el próximo viernes 18 de junio en Madrid, frente al Ministerio de Asuntos Exteriores. Allí se recibirán a todas las columnas participantes y se procederá a la lectura del manifiesto que ha sido firmado ya por miles de personas. El sábado 19 de junio en Madrid, a partir de las 12.00 horas de la mañana, una manifestación partirá desde Plaza España hasta la Puerta del Sol, donde tendrá lugar un acto de cierre en el que participarán diversas personalidades del mundo de la cultura, con lectura del manifiesto y un micro abierto.
Los actos de la mañana servirán de prólogo a la Gala Solidaria que se celebrará ese mismo sábado en el Auditorio de UGT (Avda. de América 25), a las 19.00 horas. El acto será presentado por la actriz Cristina Medina e Iván Prado (Pallasos en Rebeldía) y contará con las actuaciones de artistas saharauis como Aziza Brahim e Yslem Hijo del Desierto y los españoles Muerdo y Pedro Pastor.