TOLEDO, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -
El concejal de Promoción Económica y Empleo en el Ayuntamiento de Toledo, Juan Marín, ha criticado la "mala fe" del concejal de Izquierda Unida-Podemos, Txema Fernández, al que ha explicado que el Mercado Medieval celebrado el pasado fin de se mana en el parque de la Vega no tuvo contrato, pues una empresa solicitó una actividad comercial y pidió una ocupación de vía pública, que se tramitó como un expediente normal a cambio del pago de una tasa.
De este modo ha reaccionado el edil, preguntado durante la rueda de prensa que ha ofrecido este jueves sobre la petición de información que el edil de Izquierda Unida-Podemos realizaba este martes sobre dicho contrato, criticando que no fuera público.
"Sorprende que Izquierda Unida haga esas manifestaciones cuando entiendo que lo saben, que no es un problema de ignorancia", ha dicho Marín, que ha asegurado que la tramitación de este mercado se ha hecho del mismo modo que otros que "ya ha habido".
"El problema de Izquierda Unida, entiendo que no es de ignorancia, quizás sea mala fe, porque es el mismo procedimiento, la misma solicitud que ha planteado y que ha formulado Izquierda Unida para que se les conceda la autorización, y se les ha concedido, para celebrar la fiesta del Primero de Mayo en el paseo de Sisebuto. Lo que quiere Izquierda Unida aquí es zizañar y no pedir explicaciones, que no necesita porque las tiene", ha criticado.
PUEDE COMPAGINAR ASESORAMIENTO A COFRADÍA DEL VALLE CON ACTA
En otro orden de cosas, el edil de Vox también ha salido al paso de las críticas del portavoz de Izquierda Unida-Podemos que denunció que, como abogado de la Cofradía del Valle, está realizando una actividad privada que "se enfrenta a los intereses municipales".
Sobre este asunto, Marín ha explicado que desde hace "muchos años" asesora a la Cofradía de la Virgen del Valle, que tiene un contrato de arrendamiento con quien explota el kiosco base, del que es titular la Iglesia Católica.
"Es un problema entre Cofradía del Valle, arrendador, y kiosco base, arrendatario. El procedimiento judicial del que estamos hablando data del año 2022, cuando yo ni era concejal ni soñaba con ir en ninguna candidatura en las elecciones municipales que se celebraron el año pasado", ha indicado Marín, que ha insistido en que en este procedimiento judicial no afecta en absoluto al Ayuntamiento de Toledo, "más allá de que el kiosco base tiene una licencia municipal para una terraza, como tiene cualquier bar o restaurante de la ciudad de Toledo, sea en la carretera del Valle, sea en cualquier barrio o calle".
"Por tanto, mi intervención como abogado de la Cofradía del Valle es perfectamente compatible y legal con mi actividad como concejal del Ayuntamiento de Toledo, y el concejal de Izquierda Unida lo conoce perfectamente", ha terminado juzgando.