SALAMANCA/TOLEDO, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido a los votantes de formaciones cuyos apoyos "no van a convertirse en escaño" --con referencia directa a los de Podemos o Ciudadanos--, por la posibilidad de no alcanzar el número suficiente para obtener representatividad, que cambien su papeleta "en favor del PSOE".
Según sus palabras, esta modificación en su intención de voto podría ayudar a "sacar adelante un proyecto de cambio progresista, compatible y sensato con la Constitución y evitar el riesgo de 'escoramiento' a la cuneta, que significa hoy Vox, que va a ir más allá de condicionar la política española".
Así lo ha señalado en Salamanca, durante su visita a la Plaza Mayor, donde ha atendido a los medios de comunicación en presencia de los candidatos del PSOE al Congreso y al Senado por Salamanca y del secretario general del Partido Socialista de Salamanca, Fernando Pablos.
En este mismo lugar, antes de contestar a las distintas preguntas de la prensa, García-Page ha recordado que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, tuvo la oportunidad, tras los resultados de abril, de superar el acto de investidura con distintos acuerdos pero que hubiese supuesto "un gobierno a la parrilla y muy contradictorio con los intereses de la España de hoy".
Por eso, y así lo ha valorado el líder autonómico de la comunidad manchega, Pedro Sánchez prefirió convocar de nuevo elecciones y "anteponer los intereses de España a los del Partido Socialista, de una manera evidente".
Ahora, tras esa decisión, el PSOE tiene la posibilidad de "formar un gobierno" que "anteponga España" con "un concepto de país" que pasa por uno que sea "desde la letra a hasta la zeta, el que refleja la Constitución española , no solo el artículo 155, todos los artículos de la Constitución, también el que cree en la pluralidad del país y el que habla de las comunidades autónomas".
Por otra parte, y en referencia a los resultados obtenidos en las pasadas elecciones autonómicas en Castilla y León, donde el PSOE fue la fuerza más votada y donde finalmente el gobierno está en manos de PP y Ciudadanos por un acuerdo entre ambas formaciones, García-Page ha señalado que la Junta de Castilla y León "es el ejemplo de que lo que votó la gente se ha traducido en lo contrario de lo que quería la gente".