TOLEDO, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sumará a su lista de temas a tratar con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la reunión en Moncloa del viernes, el "cuello de botella" que hay ahora mismo con la infraestructura eléctrica.
Desde Illescas (Toledo), donde ha visitado la ampliación de la empresa FM Logistic, junto a la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, y el alcalde de la localidad, José Manuel Tofiño, el presidente regional ha adelantado que quiere aprovechar su encuentro con Sánchez para hablar del sector eléctrico.
"No sé si me dará tiempo el presidente para --entre financiación y otras cosas-- hablar de esto, pero seguramente agradece más que hablemos de esto que de financiación; de manera que me permitirá extenderme y se lo voy a documentar en todo caso con algunas propuestas curiosas", ha expuesto García-Page.
El presidente castellanomanchego ha criticado que en España se diseñó una red "a la que no le falta ningún tipo de infraestructura" en Madrid, Barcelona, Bilbao o el arco Mediterráneo. "Si una empresa necesita potencia, sabe que si se va allí, la tiene ya".
Sin embargo, ha planteado que las energías renovables no se dan donde está la industria, "allí no caben". De este modo, García-Page ha afeado que en Castilla-La Mancha se ponga "la cama", es decir, la infraestructura de energías renovables y, sin embargo, tiene que que padecer que "cuando viene una empresa a instalarse haya que estar mendigando que haya servicio eléctrico".
Una situación que le hace preguntarse al presidente regional el por qué hay restricción en España a que se amplíen las redes. "¿Por qué esas mismas estaciones que permiten entrar en la red la energía, no permiten que pueda salir para que las empresas se instalen?".
"O esto se rompe o habrá un parón al concepto de la electrificación en España y, mucho más, --ha avisado-- habrá una brecha enorme territorial entre los que ponemos la energía renovable y los que se llevan la industria".
UN MODELO RADIAL QUE OLVIDA EL CENTRO
De otro lado, García-Page ha hecho hincapié en que este país apostó por un modelo radial que olvidaba el centro peninsular y que afecta, según ha dicho, a la red de autovías y a la alta velocidad. Una alta velocidad, ha ironizado, que no está pensada para parar de por medio. "Les cuesta un disgusto cada vez que tienen que hacer una parada".
También ha cargado contra los políticos que, cuando se negocia en Madrid, aseguran que no van a hacer esto todavía "porque por aquí no pasa gente". "No pasa gente porque no hay autovía, que son cosas distintas", ha enfatizado Emiliano García-Page, quien ha subrayado que en el centro "estamos todo el día diciendo que aquí también tiene que haber economía y aquí tiene que haber oportunidades".
Sobre autopistas, ha celebrado que "por fin" se están viendo avances en cuanto a liberalizar las autopistas de peaje que "se diseñaron con cualquier órgano del cuerpo, menos con la cabeza". "Se diseñaron muy mal" y "al final las vamos a pagar entre todos".
Por tanto, ha manifestado que "algo que hemos pagado entre todos, no puede seguir siendo un cuello de botella y un estrangulamiento". Dicho esto, García-Page ve al Ministerio con una actitud "mucho más abierta". "Empezamos a ver luz", ha aplaudido.
"Está haciendo mella la insistencia y la cabezonería con la que defendemos estos objetivos y, por tanto, vamos a seguir en ellos".