CIUDAD REAL, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará el próximo martes 12 de diciembre a J.O.M.V, acusado de tres delitos de agresión sexual a una joven menor de 16 años, por los que el Ministerio Fiscal pide un total de 42 años así como la prohibición de comunicarse con ella durante un periodo de siete años y que se aproxime a una distancia inferior a 200 metros de su persona, su domicilio o lugar donde ella se encuentre.
Según relata el fiscal en su escrito de acusación, recogido por Europa Press, el acusado, aproximadamente en julio de 2011, tras llevar en coche a la menor de 12 años junto con tras dos menores al domicilio de éste le pidió que cuando se hubieran dormido las otras, le visitara en su habitación.
Cuando fue a la habitación del procesado, actuando con evidente ánimo libidinoso, la tiró contra la cama, forzándola e impidiendo que abandonase el lugar y tapándole la boca para impedir que solicitara auxilio, para posteriormente abusar de ella. La meno abandonó el domicilio tras este episodio, pero manifestándole el acusado que si contaba algo de lo sucedido le pasaría algo a su familia.
Unos dos meses después del episodio anterior, acudió al domicilio de la menor, que se encontraba en el piso inferior ocupado por el mismo, y aprovechando que estaba vacío, condujo a la menor a la habitación de su hermana y repitió el mismo patrón que en el primer episodio de abuso sexual, que se volvió a producirse en una tercera ocasión aproximadamente una semana después del segundo.
Por cada uno de estos tres episodios de agresión sexual a una menor la Fiscalía pide 14 años, que suman un total de 42 años de cárcel para el acusado.
La perjudicada, asistida por sus representantes legales interpuso una denuncia por los hechos en marzo de 2014. La víctima, E.P.C.S, mayor de edad en la actualidad, no sufrió lesiones o secuelas ni precisó de atención psicológica o psiquiátrica a consecuencia de los hechos, no efectuando ninguna reclamación.
Asimismo, el Ministerio Fiscal señala que "se interesa que la sala de audiencias donde se celebre el juicio disponga de material necesario para evitar la confrontación visual entre el acusado y la víctima".