CIUDAD REAL, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real tiene previsto juzgar los próximos 5 y 6 de mayo a P.N., un acusado para el que piden cinco años de cárcel por un delito de abuso sexual hacia una mujer en la capital ciudadrealeña.
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos se remontan a 2018 cuando el acusado y la víctima --A.-- empezaron a hablar en el bar, situado en Ciudad Real, volviendo a hacerlo varias veces durante la noche.
En el transcurso de ese tiempo el acusado invitó a A. a dos cerveza. Esa noche la víctima consumió en torno a tres o cuatro cervezas, dos vinos y un chupito de un licor.
Cantidad de alcohol que, según el Ministerio Público, en otras ocasiones había consumido y le permitía ser plenamente consciente de sus actos. A lo que añade que se fumó también menos de un porro.
Así, prosigue que cuando A. se disponía a regresar a su domicilio, dirigiéndose por la calle a coger un taxi en la parada de la calle de la Mata, el procesado la siguió dándole alcance.
A partir de ese momento, continúa, la víctima perdió la conciencia de los actos que posteriormente se desarrollaron, de modo que viajaron en el taxi ella y el procesado hasta el hotel donde P.N. se había registrado la tarde anterior con otro nombre.
Una vez en la cama de la habitación del hotel, el procesado, aprovechó el estado en que se encontraba A. para abusar sexualmente de ella pese a que le dijo en reiteradas ocasiones que no quería mantener relaciones con él.
En este sentido, el fiscal señala que la víctima trató de quitarse al procesado de encima, apartándolo de su pelvis, si bien el estado en el que se encontraba le dificultaba las acciones defensivas, a la vez que le repetía que la dejase.
MIEDO A LA REDACCIÓN
Sin embargo, apunta, "por miedo a la reacción de éste, no se resistió, esperando que terminase para poder marcharse". A lo que añade que cuando terminó, A. perdió la consciencia, encontrándose aturdida, sensación y dolencia que nunca había sentido con anterioridad.
Por lo expuesto, el Ministerio Público concluye que A. presenta sintomatología congruente con haber sido víctima de un delito de abuso sexual y seguía recibiendo en 2020 asistencia psicológica debido a la ansiedad que le provoca tener noticias en cuanto al procedimiento judicial, aunque la sintomatología que ha ido presentando se ve disminuida y progresa favorablemente.
Por auto de 19 del 12 de 2018 se prohibió al acusado acercarse a A., a su domicilio, lugar de trabajo o cualquiera que sea el lugar en que la misma se encuentre a una distancia mínima de 200 metros y establecer con ésta cualquier tipo de comunicación directa o indirecta durante la sustanciación del presente procedimiento.
El fiscal pide imponer la pena de 5 años de prisión al acusado, natural de Gambia y en situación irregular en España, que será sustituida conforme a lo dispuesto en el artículo 89 del Código Penal por su expulsión del territorio español, no pudiendo regresar a España en un plazo de 8 años contados desde la fecha de su expulsión.
También pide la prohibición de acercarse a A., a su domicilio, lugar de trabajo o cualquiera que sea el lugar en que la misma se encuentre a una distancia mínima de 200 metros y establecer con ésta cualquier tipo de comunicación directa o indirecta durante 8 años.