MADRID/TOLEDO 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior, de acuerdo con las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), alerta por fuertes lluvias en diferentes zonas del área mediterránea peninsular y de Baleares, así como en zonas de Andalucía durante el jueves 18 y el viernes 19 de octubre.
En concreto, las precipitaciones más intensas se esperan en la provincia de Castellón, que tiene asignado el nivel rojo de alerta, donde podrían acumularse hasta 180 litros por metro cuadrado (l/m2) en 12 horas. También hay previsión de tormentas y fuertes vientos en tierra y costeros en zonas de Andalucía, Cataluña, Castilla-La Mancha y Extremadura.
Este jueves 18 de octubre una borrasca atlántica penetrará por el suroeste peninsular, al mismo tiempo que una borrasca mediterránea se acercará por Baleares. En la primera mitad de la jornada se producirán precipitaciones localmente fuertes en Andalucía, Comunidad Valenciana y Cataluña y a partir de la tarde, la interacción de las borrascas hará que las precipitaciones se intensifiquen en Cataluña, Aragón, Comunidad Valenciana y Baleares, donde se espera que sean localmente muy fuertes y persistentes hasta el final del viernes 19.
Por ello, ante las lluvias intensas, Protección Civil señala que, si se va conduciendo, hay que disminuir la velocidad, extremar las precauciones y no detenerse en zonas donde pueda discurrir gran cantidad de agua.
Si hay que viajar, pide procurar circular preferentemente por carreteras principales y autopistas. En caso de tormentas súbitas y lluvias intensas, se debe tener en cuenta el lugar donde se aparcan los vehículos. El rápido ascenso del nivel de las aguas puede dañar los vehículos aparcados sobre zonas inundables y, además, arrastrarlos, provocando daños a bienes ajenos e incluso obstaculizar el flujo natural de la corriente.
Si comienza a llover de manera torrencial, hay que pensar que existe riesgo de inundación por lo que no hay que atravesar con su vehículo ni a pie, los tramos inundados, al desconocer lo que puede haber debajo del agua y localizar los puntos más altos de la zona. También pide no intentar salvar su automóvil en medio de una inundación.
En caso de estar en el campo, hay que alejarse de los ríos, torrentes y zonas bajas de laderas y colinas, evitando atravesar vados inundados; y dirigirse a los puntos más altos de la zona.
Ante el riesgo de tormentas, advierte de que en los núcleos urbanos hay peligro de caída de rayos, por lo que es conveniente colocarse cerca de los edificios para protegerse. En las viviendas se aconseja evitar las corrientes de aire y, si se va conduciendo, un vehículo cerrado puede ser un buen refugio.
Si la tormenta le sorprende en el campo, hay que evitar correr y permanecer en lugares elevados, como los altos de las colinas, crestas o divisorias, y no refugiarse bajo los árboles y alejarse de alambradas y objetos metálicos.
Ante el riesgo de inundaciones, pide no conducir en áreas inundadas, abandonar el automóvil y buscar un terreno más alto cuando se vea rodeado por una corriente de agua. Pide también procurar circular, preferentemente, por carreteras principales y autopistas; y alejarse de vías y torrentes y no trate de atravesar a pie vados inundados o corrientes de agua.
Ante vientos costeros, pide alejarse de la playa en zonas marítimas y de otros lugares bajos que puedan ser afectados por las elevadas mareas y oleajes que suelen generarse ante la intensidad de vientos fuertes; evitar estacionar los vehículos en zonas que puedan verse afectadas por el oleajes y no poner en riesgo la vida ante las imágenes espectaculares del fuerte oleaje.
Ante fuertes vientos, conviene asegurar puertas, ventanas y todos aquellos objetos que puedan caer a la vía pública y alejarse de cornisas, árboles, muros o edificaciones en construcción o grúas que puedan desprenderse. También, conviene abstenerse de subir a los andamios sin las adecuadas medidas de protección.
Si se va conduciendo, pide extremar las precauciones, especialmente en la salida de túneles, adelantamientos y cruce con vehículos pesados en carreteras de doble sentido; y prestar atención ante la posible presencia de obstáculos en la carretera.