El Síndico de Cuentas asegura que era "previsible" la supresión

TOLEDO, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El síndico de Cuentas de Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Cabezas de Herrera, cuyo mandato termina el 22 de noviembre, ha asegurado que era "previsible" que la Junta iba a suprimir la institución que él dirige tras el informe del Gobierno central que recomendaba a las comunidades la supresión de aquellos organismos que pudieran suponer la duplicidad con otros órganos similares del Estado.

   El síndico ha hecho estas declaraciones después de que la presidenta autonómica, María Dolores de Cospedal, haya anunciado la intención del Gobierno regional de "eliminar del ámbito de Castilla-La Mancha la figura de la Sindicatura de Cuentas" de la Comunidad Autónoma, tras lo que la carga de trabajo de esta institución será remitida a partir de entonces al Tribunal de Cuentas del Estado.

   Miguel Ángel Cabezas de Herrera ha explicado que su posición es de "absoluto respeto institucional y anuncio de la mayor de las lealtades en el proceso que ha de venir para el traspaso de estas funciones al Tribunal de Cuentas del Estado".

   Asimismo, ha recalcado que la Sindicatura de Cuentas de Castilla-La Mancha "va a trabajar en estos meses que quedan" para que el Tribunal de Cuentas pueda continuar con "el ritmo y agilidad" en el trabajo de fiscalización como ha ocurrido hasta ahora.

   "Respeto hacia las decisiones del Ejecutivo, colaboración y lealtad institucional total por parte de la Sindicatura para efectuar el traspaso de esas funciones con la mayor celeridad y sin perdida de un gramo de eficacia en la nueva asunción por parte del Tribunal de Cuentas", ha indicado.

   Igualmente, ha agradecido que Cospedal haya reconocido la "eficacia" con la que la Sindicatura de Cuentas ha venido a desempeñando las funciones que tenía encomendadas.

   Ha recordado que en una comparecencia parlamentaria dijo, al hilo de una pregunta de una diputada, que "lo importante no es tanto la existencia o no de un órgano de control regional como la Sindicatura de Cuentas, sino la garantía del ejercicio de la función fiscalizadora desempeñando por quien fuera".