TOLEDO, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
La visión de un futuro cercano en el que el mundo estará organizado esencialmente en grandes urbes o la equidad tecnológica con los grupos terroristas, algo que provocará que esta "deje de ser un factor" clave para los ejércitos occidentales en la lucha contra el terrorismo, han marcado la lección inaugural del curso 2017/2018 en la Academia de Infantería de Toledo, que ha sido llevada a cabo este viernes por el director de la Academia General Militar, el general Luis Lanchares Dávila.
"La superioridad tecnológica de los ejércitos occidentales ya no es tal. Solo hay que ver al Daesh, disponen de lo mismo que las fuerzas que les combaten. La tecnología va a dejar de ser un factor del que podamos aprovecharnos", ha apuntado Lanchares.
Bajo el título 'El factor humano, clave del éxito en el mando de las pequeñas unidades de Infantería', esta ponencia ha sido el preludio del comienzo de un nuevo año académico en un acto en el que Lanchares ha resaltado la importancia del "realismo" en la formación, el conocimiento de idiomas para cooperar con otros ejércitos o "la empatía" para poder liderar un equipo de soldados.
"Valor, lealtad y disciplina", ha remarcado el general como tres de los conceptos "fundamentales" en la formación del medio millar de alumnos que van a comenzar este año su formación militar, en un contexto marcado por "el desconocimiento" del futuro, "la versatilidad" en el campo de batalla o el rol de los infantes en esas grandes ciudades a las que se ha referido Lanchares.
Precedido por la presentación del director de la Academia de Infantería, el coronel Francisco Javier Marcos, la lección de Lanchares ha resaltado en primer lugar la concepción del "campo de batalla del futuro". En él, el general apuesta por que "se repitan constantes del pasado" o en que los enemigos "saquen ventaja" actuando de manera "enmascarada" en "las megaciudades".
FORMACIÓN REALISTA
"El jefe de pelotón va a tener una especial relevancia discerniendo quién es el adversario", ha expresado Lanchares. De esta manera, ha recalcado la importancia de realizar una formación "realista", en la que los nuevos soldados, oficiales o suboficiales se entrenen como "si mañana fueran a combate", aplicando conceptos como "compañerismo, valentía o liderazgo".
Una preparación que, en primer lugar, hay realizar con el físico: "La primera virtud, la más simple de todas, es estar en buena forma física". "Disfrutad de la profesión, sed felices, id con ilusión, vivid con pasión, entregaros sin reservas, no caben términos medios. Los soldados del Ejército de Tierra son grandísimos profesionales, con cruces rojas ganadas en combate. Si la actitud es de dudas, si el teniente o sargento no se entrega, difícilmente se va a cumplir misión", ha manifestado el general.
APOYO SOCIAL A LA ACADEMIA
Previamente a la lección inaugural de Lanchares, el director de la Academia ha agradecido la presencia institucional en el acto, entre ellos el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, o el vicealcalde de Toledo, José María González Cabezas, entre otros, y ha solicitado "encarecidamente" el apoyo a la Academia de Infantería por parte de la sociedad.
De otro lado, Francisco Javier Marcos ha apuntado en la inauguración del curso, donde han estado presentes casi la mitad de los aproximadamente 500 alumnos que pasarán por la academia este año, que en los próximos cuatro meses se irán incorporando el resto de alumnos, "damas y caballeros" que harán cursos de perfeccionamiento en su labor como oficiales y suboficiales.
"Quiero formaros para actuar en cualquier tipo de conflicto, en cualquier parte del mundo, donde vive la gente, no podéis fallar. Todos tenemos que asumir que la forma de combatir ha cambiado, aunque las razones por las que la gente combate siguen siendo las mismas: por temor, por honor o por interés", ha destacado el director de la Academia de Infantería.