Adjudicado el contrato para la instalación de 4 soportes que informarán a los conductores de los accesos a la ZBE

VALLADOLID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Gobierno Local ha aprobado este martes, 26 de noviembre, la adjudicación del contrato para el suministro e instalación de los primeros soportes que informarán a los conductores de los 16 accesos a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad de Valladolid.

La adjudicataria ha resultado la empresa Kapsch TrafficCom Transportation, S. A. U., por un importe de 249.997 euros, IVA incluido, según ha informado el Ayuntamiento de Valladolid en un comunicado recogido por Europa Press.

En concreto, este contrato permitirá la adquisición de cuatro de los 19 paneles que se ubicarán en: Paseo de Zorrilla con Daniel del Olmo (Lava), Padre Acosta con calle Mieses, avenida de Gijón con Fuensaldaña y avenida de Segovia con Paseo de Juan Carlos I.

Esta actuación cuenta con una subvención concedida por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (Mitma), que forma parte de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiados a su vez por la Unión Europea con fondos Next Generation EU.

La instalación de esta señalética permitirá que todo conductor que se encuentre en las proximidades de la ZBE sea consciente de ello y pueda tomar la decisión correcta sobre la entrada o no en función de las características del vehículo y los condicionantes establecidos por la ordenanza reguladora a sus titulares, con lo que se evitará incurrir en infracciones y se tendrá la posibilidad de utilizar itinerarios alternativos.

Conforme a la ZBE aprobada y al tener en cuenta la ordenación de los sentidos de circulación, se detectan 16 puntos de entrada a la misma, a los efectos de ubicación de elementos fijos para señalizarla, pudiendo variar este número en función de posibles modificaciones en la ordenación del tráfico.

El número de señales a instalar por cada punto de entrada estará en función de sus características y las del viario del entorno, con lo que se busca la eficiencia en la señalización de forma que el usuario no tenga problemas en la comprensión de la información que se pretende transmitir y, a la vez, se evita la excesiva proliferación de elementos de señalización que reduzcan o desvíen la atención del conductor, según ha precisado el Ayuntamiento.