ÁVILA, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Alicia García, ha abogado por profundizar en la participación, más inclusión socio-laboral y mayor visibilidad de las mujeres con discapacidad en la sociedad, en la apertura del 'Congreso Internacional Mujer y Discapacidad, Cruzamos fronteras'.
El congreso, que el miércoles clausurará la Reina Letizia, sirve de encuentro a expertos nacionales e internacionales para debatir sobre la realidad, problemática y necesidades de las mujeres con discapacidad.
La consejera ha destacado el hecho de que un congreso de estas características se celebre en Castilla y León, 14 años después del primero y único de esta dimensión que hubo en España.
"Es una elección que no es ajena a la especial sensibilidad de la Comunidad con las personas con discapacidad", que se concreta en hitos como haber sido la primera en aprobar una Ley de Igualdad de Oportunidades para las personas con discapacidad o en contar con un modelo integral y pionero en la atención a las personas con discapacidad, que se recoge en el recientemente aprobado Plan Estratégico.
La consejera se ha referido a que el congreso se define por su novedad, por su carácter innovador y por su utilidad, ya que "va a propiciar reflexión sobre la discapacidad y el género y surgirán propuestas e iniciativas que servirán para orientar el diseño e implementación de las políticas de igualdad, tanto públicas como de las entidades del Tercer Sector, para la integración social y laboral en clave de igualdad de las mujeres con discapacidad".
En la inauguración oficial del 'Congreso Internacional Mujer y Discapacidad, Cruzamos fronteras', la consejera se ha referido también a que, a pesar de que la situación ha cambiado a mejor y las mujeres con capacidades diversas comienzan a ser consideradas y a considerarse públicamente como agentes de transformación social, "todavía queda mucho por hacer".
En este sentido, García ha destacado tres aspectos esenciales por su vinculación entre género y discapacidad, que son "objeto de atención preferente del propio congreso: empleo, capacidad de decidir y violencia de género".
En primer lugar, el empleo como mejor herramienta para la vida independiente, en este sentido son esenciales los programas para ampliar y mejorar su empleabilidad, de igual manera que facilitar el acceso a ayudas técnicas y nuevas tecnologías.
El segundo aspecto que ha destacado la consejera es el hecho de que la calidad de vida de una persona se puede medir por el nivel de elección que tiene, "por este motivo, el modelo de atención a las personas con discapacidad se centra en el proyecto de vida integrado que, a partir de sus necesidades y preferencias y a lo largo de todo su ciclo vital, permite a la persona con discapacidad, con los apoyos oportunos, tomar sus propias decisiones".
También ha destacado la violencia de género en las mujeres con discapacidad, ya que en 2015, en España, el cinco por ciento de las víctimas mortales de violencia de género fueron mujeres con discapacidad.
En Castilla y León, 435 mujeres con discapacidad han sido registradas desde 2013 como víctimas de violencia de género, es decir, un diez por ciento del total de las víctimas registradas.
La vulnerabilidad de las mujeres con discapacidad en relación con la violencia está estrechamente ligada a dos factores claves, "la percepción social de que los hombres y mujeres no son iguales, lo que supone una dominación social y física de los hombres hacia las mujeres", y "la percepción social de la discapacidad, en donde los cuerpos de las personas con discapacidad son vistos diferentes al del resto".