VALLADOLID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
Este martes se cumple un año de las elecciones municipales del 28 de mayo de 2023, que en el caso del Ayuntamiento de Valladolid dejaron al PSOE del entonces alcalde y candidato a la segunda reelección, Óscar Puente, como partido más votado pero igualado a número de escaños con el PP y sin opción de garantizar la investidura junto a sus socios de las dos anteriores mandatos, VTLP, por lo que la puerta quedaba abierta para un pacto entre los 'populares' y Vox que tres semanas después llevaría a Jesús Julio Carnero a la Alcaldía de Valladolid.
En la jornada electoral, que contó con una participación del 67,24 por ciento, el PSOE lograba imponerse por segunda convocatoria consecutiva como partido más votado, con un 36,69 por ciento de los votos pero la diferencia con el PP (36,22 por ciento) era mínima, 758 apoyos, de modo que ambos partidos obtuvieron la misma cifra de concejales con once.
Con ello, el PSOE, que incluso había mejorado en porcentaje de votos con respecto a las elecciones de 2019, mantenía la cifra de ediles de los últimos cuatro años, mientras que el PP crecía de nueve a once.
En tercer lugar quedo Vox, que con un 11,67 por ciento de los votos obtendría tres concejales que finalmente serían la clave para propiciar el gobierno de coalición que gobierna la ciudad desde hace casi un año, con el 'popular' Jesús Julio Carnero como alcalde y los tres representantes del partido dirigido por Santiago Abascal dentro del equipo de Gobierno municipal.
En la noche electoral, el candidato del PP celebraba ya haber "conseguido" el objetivo gracias a que los ciudadanos de Valladolid habían votado "cambio y transformación" y habían dicho "no" a la "resignación" que, a su juicio, encarnaba el entonces alcalde socialista Óscar Puente.
El resultado dejaba un escenario en el que era necesario un acuerdo entre el PP y Vox para que Carnero pudiera ser investido alcalde y ambos partidos lo sellaron unas semanas después, antes de la sesión constitutiva de la nueva Corporación, que se celebró el 17 de junio y en la que dio inicio una nueva etapa de gobierno municipal formado por dos partidos, en este caso de derechas.
La clave para el escenario postelectoral fue el retroceso de la plataforma de izquierdas Valladolid Toma la Palabra, que en los dos mandatos anteriores había formado parte del Gobierno municipal junto al PSOE y que el 28 de mayo de 2023 se quedaba con un 9 por ciento de los votos y perdía uno de los tres ediles que había logrado en 2019.
La suma de PSOE y VTLP, de 13 concejales, ya no era suficiente para investir a Puente como alcalde y el ahora ministro de Transportes y Movilidad Sostenible lo asumía así a los poco minutos de cerrarse el escrutinio en la noche del 28 de mayo.
Óscar Puente daba por hecho que no podría gobernar en los siguientes cuatro años, al tiempo que consideraba que no perdían la Alcaldía por errores propios, sino porque el PSOE no había "sabido imponer la dinámica local a la nacional".
Unas horas después el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anunciaba la convocatoria de elecciones para el 23 de julio y tras ellas y el acuerdo con fuerzas de izquierdas e independentistas que permitió mantener el Ejecutivo formado por PSOE y Sumar el exalcalde vallisoletano dio el salto a la política nacional y fue nombrado ministro de Transportes en noviembre de 2023.