VALLADOLID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
La bajada del caudal del Pisuerga a su paso por Cabezón (Valladolid) ha dejado sin agua potable a los 1.300 soldados que acoge la Base Militar de El Empecinado, próxima al municipio de Santovenia de Pisuerga. Una situación que comenzó a principios del mes de septiembre y que se prolongará hasta que el río no recupere los niveles normales.
El agua potable y sanitaria que se consume en la Base El Empecinado proviene de una ETAP (Estación de tratamiento de agua potable) construida en 1941 y que toma el agua del río Pisuerga. Las variaciones en el caudal del río inciden de manera importante en las características del agua --pH, turbidez, contaminantes, materia orgánica, algas, entre otras--. Este problema, "habitual", se acentúa en la época estival y se ve agravado en la actualidad por la sequía, han señalado a Europa Press desde la oficina de Comunicación de la Cuarta Subinspección General del Ejército.
La extrema situación de sequía que vive la Comunidad y que está afectando a los ríos de la Comunidad, incluido el Pisuerga, hizo que a principios de septiembre se declarara el agua no apta para el "uso y consumo humano", por lo que se adoptaron las medidas oportunas para "evitar posibles incidencias", señalan las mismas fuentes.
Así, detallan, aparecieron pequeñas concentraciones de bacterias, con lo que se anuló el empleo de agua caliente en toda la Base, se apagaron todos los calentadores, se clausuraron las duchas y se prohibió la limpieza de vehículos.