Burgos rememora su pasado como referente en la acuñación de la moneda castellana, española y del nuevo mundo

BURGOS 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Burgos, de la mano de la Real Casa de la Moneda, la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT), muestra en el Arco de Santa María una exposición sobre la historia de la Real Casa de la Moneda de Burgos, una institución considerada fundamental en la acuñación de monedas en España durante siglos.

El título de la exposición es 'Piedra y Metal: Burgos y la Casa de la Moneda' y está comisariada por el historiador burgalés, Jesús Ojeda. El director del Museo Casa de la Moneda Rafael Feria, ha glosado la historia de la Ceca de Burgos.

En la inauguración también ha participado la directora general de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, Isabel Valldecabres, que ha asegurado que Burgos sigue siendo "referente" en el presente y lo será en el futuro, con su fábrica de papel moneda.

Burgos fue durante seis siglos -desde el siglo XIII al XVIII- la ciudad que acuñó la moneda castellana y española. Monedas de oro, plata, vellón y cobre con la letra B que identificaba que era una producción de la Real Casa de la Moneda de Burgos.

También fabricó, junto con Sevilla, las primeras monedas que llegaron a circular en el nuevo mundo.

La Casa de Moneda de Burgos estaba ubicada en el Camino de Santiago, en la actual calle San Juan, ya desde el siglo XIII.

Las familias burgalesas de los Mazuelo, Astudillo y los Salamanca, las cofradías como la de los Caballeros del Santísimo y de Santiago son consideradas "claves" en el desarrollo de la ceca burgalesa.

Burgos se convirtió en el punto estratégico del comercio con Flandes, que da acceso a las minas de plata alemanas y de Centro Europa.

Y también para la creación de mercados como el local o el de Medina del Campo y la cercanía con el puerto de Laredo, de salida y entrada de la mercancía.

Todo ello, le permitió, según han explicado ser un referente en la producción de moneda para todo el reino, entre los siglos XIII al XVI. La Casa de Moneda de Burgos cerró en 1728. Recuperó su protagonismo con las emisiones del Gobierno nacional durante la Guerra Civil.

Tras terminar la contienda civil, la necesidad de nacionalizar y estatalizar la producción de los billetes de Banco en España trajo consigo que la FNMT se encargara de su impresión y que se tomara en 1944 la decisión de construir en Burgos una Fábrica de Papel Moneda.

Se inauguró de 1953 y desde entonces, se han fabricado todos los pliegos de papel que llevan marca de agua para los billetes de 100, 200, 500, 1.000, 2.000, 5.000 y 10.000 pesetas, además del euro y billetes para otros países.