BURGOS, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Arte Caja de Burgos CAB inaugura hoy las dos nuevas propuestas artísticas que permanecerán abiertas al público hasta el próximo 28 de mayo, concebidas, respectivamente por el Alejandro Corujeira y el creador burgalés Antonio Sanz de la Fuente.
Dos visiones en torno a los límites entre pintura y escultura se dan la mano en el arranque de esta temporada, con el recuerdo a la obra final de Sanz de la Fuente y las delicadas formas de Alejandro Corujeira
Conocido fundamentalmente, y casi sin excepción, como pintor, Alejandro Corujeira ha realizado para el Centro de Arte Caja de Burgos CAB una sugerente y delicada instalación escultórica con 'El tórax de los sueños'. El artista interpreta el espacio del CAB como un paisaje matizado por la luz que despiden las esculturas.
La atmósfera que las envuelve y que se trasdosa hasta las paredes obliga al espectador a trazar su propio recorrido, a dejarse atrapar por la disputa entre el trazado geométrico y la abstracción cromática. Paradójicamente, la sensación de dibujo, de trazo, de escritura en el espacio desplaza la firmeza de los volúmenes, los diluye y los convierte, de nuevo, en pintura, en paisaje.
'El tórax de los sueños' parte de idénticas premisas a las de su pintura, pero se materializa de modo diferente. El espacio físico del CAB se ocupa con volúmenes, con armazones macizos y contundentes. Esqueletos de madera que trazan formas precisas, de una geométrica manipulada, forzada más allá de la convención. Estructuras que parecen contener un interior inalcanzable, pero cuya revelación Alejandro Corujeira sugiere al vestir los muros con los mismos colores que tiñen los cuerpos escultóricos.
Se ha dicho que Alejandro Corujeira maneja a la par la abstracción más lírica y la abstracción geométrica, transformada ésta en un trasunto orgánico que evoca formas de vida embrionarias, o redes en las que parecen quedar atrapadas las latencias de una memoria a punto de activar los recuerdos.
Esta intencionada transversalidad se acentúa con otra de las singulares aportaciones de Alejandro Corujeira para esta exposición: un trabajo de land-art realizado por el artista durante el mes de agosto de 2016.
Se trata de dibujos trazados sobre un campo de arena pedregosa que tituló 'El pequeño sentido'. Un jardín de arena construido como un terreno para la reflexión, un lugar en el que experimentó cómo la misma acción del dibujo no podía disociarse del espacio que necesariamente había de recorrerse para marcar las líneas que lo definían.
'LO ESENCIAL', DE ANTONIO SANZ
Por su parte, 'Lo esencial. Obra última. 2001- 2013', de Antonio Sanz de la Fuente, es una gran exposición antológica, promovida por el Ayuntamiento de Burgos y la Fundación Caja de Burgos, que repasa la obra y el recorrido vital del autor, uno de los más destacados artistas de finales del siglo XX y comienzos del XXI en nuestra comunidad. Un recorrido que parte de 1976, con sus años iniciales y sus primeras exposiciones públicas, para concluir con su obra final en 2013, fecha de su temprano fallecimiento.
El Centro de Arte Caja de Burgos CAB mostrará, precisamente, su obra última. Además de su reconocida pintura y sus elaborados collages, Antonio Sanz de la Fuente (Burgos, 1951-2013) realizó una serie de esculturas que hasta el momento permanecen inéditas y que constituyen una de las más interesantes novedades de esta retrospectiva.
Junto a la muestra en el CAB, podrán verse en el Arco de Santa María, hasta el 2 de abril, las obras pertenecientes al periodo comprendido entre 1976 y 2000 en una muestra de más de 60 piezas que presenta creaciones que van desde los primeros dibujos de su etapa de formación hasta el comienzo de los grandes formatos.
Sin olvidar su característico lirismo y sin dejar de asomar algunos rasgos gestuales, la pintura que elaboró Antonio Sanz de la Fuente en su última etapa se caracterizó por la contención formal, el equilibrio y el empleo de geometrías que con mucha frecuencia rebasaban holgadamente el marco del cuadro.
Nacido en Burgos en 1951, Antonio Sanz de la Fuente comenzó a pintar siendo niño cuando reproducía las acuarelas que su padre llevaba a casa. Formado inicialmente en la Academia Provincial de Dibujo de Burgos, se licenció en la Escuela de Bellas Artes de Madrid y amplió estudios en la Jan Van Eyck Academie de Maastrich, Holanda. Fue profesor y catedrático de Artes Plásticas y Diseño en la Escuela de Arte de Burgos.
Del realismo simbólico de sus comienzos Antonio Sanz de la Fuente fue dando paso a una abstracción paulatinamente más depurada, de colores terrosos y fríos que otorgan a la obra una atmósfera intimista, de fuerte carga emocional.
Su trabajo decididamente vanguardista transitó por los límites de la pintura y la escultura. Sin abandonar la forma canónica del cuadrado y el rectángulo, exploró sus límites y las relaciones con otros materiales al superponer estructuras y elementos ajenos a la tradición.
Antonio Sanz de la Fuente está unido también a la historia de la actual Fundación Caja de Burgos, pues algunas de sus obras fueron adquiridas para ocupar dependencias significativas de la Casa del Cordón, una vez rehabilitada en 1986.
Sanz de la Fuente falleció a los 61 años en 2013. Era viudo de la también pintora Carmen Nieto Manglano (Madrid 1949-Burgos 2006), y sin duda una de las personalidades más queridas y respetadas entre la comunidad artística de nuestra ciudad y región.