Los contratos por obra y servicio se han transformado en contratos en prácticas
VALLADOLID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Comisiones Obreras de Castilla y León, por medio del Sector de Enseñanza Universitaria de la Federación de Enseñanza (FE-CCOO CyL), ha denunciado públicamente el, a su juicio, proceder "obstruccionista" de las universidades públicas a la hora de fomentar la labor investigadora de los jóvenes talentos.
Las críticas de CCOO surgen tras tener conocimiento de un cambio realizado por la Seguridad Social en la consideración de los contratos predoctorales de las universidades y de los organismos públicos de investigación. Este cambio ha convertido lo que eran contratos por obra y servicio en contratos en prácticas, "farragosa explicación para un cambio que en realidad encierra graves consecuencias para los propios afectados".
A la hora de hacer una estimación aproximada, el sindicato, a través de un comunicado recogido por Europa Press, calcula que en Castilla y León podría haber cerca de unos 1.000 afectados, y que a nivel nacional esta cifra se podría multiplicar por 10 hasta alcanzar las 10.000.*
Esta modificación en la modalidad del contrato, en opinión de CCOO, entorpecerá el acceso al sector productivo de estos jóvenes debido a restricciones legales. Pero advierte de que este cambio, no sólo está afectando a los nuevos contratos, sino que se está aplicando retroactivamente a contratos anteriores. Ya se están dando casos de jóvenes que, una vez finalizado su doctorado y concluyendo con éxito un proceso selectivo para un puesto de trabajo, no pueden finalmente incorporarse a la empresa porque no se les puede hacer un nuevo contrato en prácticas.
FE-CCOO CyL lamenta que a este problema se añaden otros que, aunque de menor calado, no dejan de ser importantes: como el reconocimiento de una indemnización por finalización de contrato, y el acceso a la tarjeta sanitaria internacional, siendo este un problema nada despreciable en este tipo de contratos por la necesidad de realizar estancias en centros extranjeros para la consecución de sus estudios.
Este cambio es un factor más que desalienta a los jóvenes a llevar cabo una carrera investigadora, ya que pese a los altos requisitos exigidos para su acceso y las largas jornadas de trabajo, se compensa con bajos salarios y una gran inestabilidad laboral.
"Un contrato destinado a la obtención del doctorado parece más propio de un contrato por obra que de un contrato en prácticas. Pero no queremos profundizar en un debate técnico sobre cuál debería ser la figura contractual más correcta, hay algo más importante en juego", incide el sindicato, que entiende que es preciso incentivar la formación y la creación de conocimiento si se quiere obtener un sistema productivo diversificado, una competitividad que no esté basada en la merma de las condiciones laborales sino en el valor añadido de nuestra oferta, y que todo ello redunde en un adecuado desarrollo económico y social.