VALLADOLID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Comisiones Obreras ha aseverado que la "extrema derecha" conoce que su propuesta de reabrir la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) es "inviable técnica y económicamente" y ha incidido en que Castilla y León "debe mirar hacia el futuro porque es líder en energías renovables en España.
En un comunicado recogido por Europa Press, el sindicato se pronuncia sobre la propuesta que llevó esta semana a las Cortes de Castilla y León y que en el debate plenario se sustentó en la aprobación de una serie de acuerdos con el apoyo de Vox y Partido Popular entre los que se incluía uno relativo a reclamar al Gobierno de España la extensión de la vida útil de las centrales nucleares en las que sea técnicamente viable.
A juicio de Comisiones Obreras, la propuesta se fundamenta en "bulos sin ningún tipo de argumentos" y existen "datos objetivos que frustran la petición de la extrema derecha de reabrir Garoña".
De hecho, el sindicato ha asegurado que la empresa titular, Nuclenor, "que es la que tiene la última palabra, ya ha descartado esta propuesta de la extrema derecha explicando que el coste no se puede asumir porque equivaldría a los de una nueva autorización"
Según explican, Castilla y León consume el 4,92 por ciento del total de la energía producida en el estado español y produce el 10 por ciento de la energía del Estado. En la comunidad se genera el 27 por ciento de la hidráulica estatal, el 21 por ciento de la eólica estatal y el 7,03 por ciento de la fotovoltaica estatal.
De hecho, han recalcado que Castilla y León "podría abastecerse únicamente de lo que produce en eólico". En el año 2021, insisten en que se generaron con esta energía 13.579.194 megavatios/hora (Mw/h) en Castilla y león y se consumieron 11.910.103 Mw/h.
"Frente a las ventajas de las energías alternativas, la energía nuclear no es limpia, ni barata, ni infinita, ni segura. No es limpia porque genera residuos de alta actividad con miles de años de peligrosidad y no podemos dejar esa responsabilidad a las generaciones futuras", han apuntado.
Por otro lado, han defendido que la nuclear "no es barata porque la extracción del uranio, el enriquecimiento, la construcción de la central, el mantenimiento y condiciones de seguridad, el desmantelamiento de la central, la gestión durante años de los residuos en un espacio controlado y vigilado".
A ello han añadido que "se basa en un combustible que no es renovable, el uranio, cuyo precio irá subiendo según nos acerquemos a su pico de producción y consumo que se calcula que sea en menos de 30 años", por lo que consideran "más práctico buscar alternativas a la nuclear que basar la transición energética en una energía que nace ya con los días contados".
Por otro lado han afirmado que recientemente en Francia ha habido "problemas con la nuclear, en concreto con los reactores parados" en referencia a "problemas de corrosión, problemas en la refrigeración de los reactores en la ola de el calor".
Además, recalcan que "la extrema derecha conoce perfectamente la situación actual de Garoña" y que Nuclenor ha reconocido que "no se va a acometer la inversión debido al mal estado del reactor por los problemas conocidos de corrosión que tenía la central en 2012 cuando dejó de funcionar".
El valle de Tobalina y la zona de influencia de la central nuclear tiene, en opinión de CCOO, la oportunidad de diversificar su actividad y desarrollar el convenio de transición justa ya iniciado. El desmantelamiento de Garoña está en marcha y la reactivación económica de la comarca también.
"Castilla y León no puede estar siempre mirando al pasado ni quedarse anclada en el pasado. La comunidad tiene que mirar el futuro y el futuro no pasa precisamente por reabrir centrales nucleares", han concluido.