CEOE reclama a la Junta que la nueva Ley de FP facilite la figura del tutor en las pequeñas empresas

El nuevo texto normativo otorga por vez primera a las empresas el papel de corresponsables en la formación del alumnado

VALLADOLID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

La entrada en vigor en Castilla y León ya este curso 2024-2025 de la nueva Ley de Formación Profesional genera algunos "miedos" en el empresariado debido a los profundos cambios que introduce y por ello ha llevado hoy a la CEOE Valladolid, a través del presidente de su Comisión de Formación, Ángel Martín Villota, a reclamar a la Junta recursos suficientes para su aplicación y, sobre todo, fórmulas para que la figura del 'tutor de empresa' sea también accesible a las pequeñas mercantiles.

La petición la ha formulado este miércoles Martín Villota en el transcurso de un desayuno empresarial celebrado en Valladolid en el que se han trasladado a la Junta las principales inquietudes y demandas ante esa nueva Ley de FP que desde CEOE se entiende que se ha puesto en marcha con cierta "premura e improvisación", máxime cuando todavía hay un montón de normas aún en borradores, y para cuyo feliz desarrollo desean que la Administración regional implemente los recursos y medidas necesarias.

Durante el encuentro, al que, entre otros, han asistido el director general de FP y Régimen Especial de la Junta, Agustín Sigüenza, y el director de Banca Institucional de Caixabank, Gonzalo Cebrián, el responsable de la Comisión de Formación de CEOE Valladolid ha explicado que la patronal realizó en los meses de septiembre y octubre una encuesta entre sus asociados y una de las principales conclusiones fue no solo el escaso conocimiento de la ley entre las pequeñas mercantiles sino también las dificultades que éstas, aquellas con uno o dos trabajadores, pueden tener para contar con la figura del 'tutor de empresa'.

"Las grandes o medianas tienen una infraestructura mayor, algunas cuentan con un departamento de recursos humanos, y para ellas es más fácil acceder a la información, aunque el principal problema es que las pequeñas empresas puedan disponer de ese tutor", explica Martín Villota, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, subraya que esa figura adquiere una gran importancia en la nueva ley debido al aumento de la formación dual, pues contempla que entre un 25 y un 35 por ciento de la misma ha de realizarse en la empresa.

Tal circunstancia se traduce en que de las 2.000 horas de un ciclo, entre 500 y 700 horas de formación--antes eran no más de 360--se tienen que desarrollar en empresas, de ahí la puesta en marcha de ese 'tutor de empresa' o persona dentro de cada mercantil que alterne su tarea diaria con la de atender y formar a los alumnos en prácticas.

"Eso hay que compensarlo de alguna forma, no únicamente desde el punto de vista económico, porque el tiempo que esa persona dedica al alumno supone dejar de producir", ha insistido Martín Villota.

El representante de CEOE considera que una de las fórmulas para que las pequeñas empresas puedan disponer también de ese tutor pasa por la posibilidad de que puedan compartir uno entre distintas de ellas, como así contempla la nueva ley, aunque ve necesario que la Junta lo regule con detalle.

Por su parte, el director general de FP de la Junta, Agustín Sigüenza, ha reconocido la cierta premura en la puesta en marcha de la nueva ley pero, en su descargo, ha atribuido tal circunstancia al hecho de que el Ministerio ha publicado toda la normativa básica el pasado día 28 de mayo, con las dificultades que ello supone a la hora de desarrollar una nueva normativa que introduce muchos cambios y a la que tiene que adaptarse la autonómica.

LAS EMPRESAS, "ACTORES PRINCIPALES"

"Uno de esos grandes cambios es la corresponsabilidad que se da a las empresas, que por vez primera se convierten en actores principales en el proceso formativo de los alumnos, ya que una buena parte de la formación se desarrolla en ellas", incide Sigüenza.

Y eso "genera dudas sobre cómo hacerlo debido a que el 98 por ciento de las empresas es de menos de diez trabajadores y de ello deriva la dificultad de contar con recursos económicos y materiales para asumir es proceso formativo", en referencia a que de un total de 140.000 empresas en Castilla y León, 84.000 son autónomos y el resto mercantiles de menos de diez trabajadores asalariados.

En cualquier caso, el responsable de la Junta ha subrayado que la nueva Ley de FP "necesita a todos, grandes, medianas y pequeñas empresas", para poder atender las necesidades formativas de un total de 47.000 alumnos de FP en la Comunidad, una formación teórica y práctica de gran importancia para incrementar su competitividad.

La importancia de la FP Dual ha sido igualmente resaltada por el director de Banca Institucional de Caixabank, Gonzalo Cebrián, quien apunta que en esta década se generarán más de 150.000 ofertas de trabajo para jóvenes relacionadas con dicha formación, de ahí también la conveniencia de la nueva ley que, como así ha puntualizado, "no solo ayudará a los jóvenes a encauzar su futuro sino también supondrá la actualización de los que ya se encuentran en el mercado laboral".

Las prácticas formativas en empresas darán comienzo ya el próximo mes de febrero, concretamente a partir de la semana diecisiete o dieciocho del curso, pero para ello los alumnos habrán de haber superado la formación sobre prevención de riesgos laborales.