La situación en Cataluña, la negociación del Brexit o el proteccionismo de Trump, principales riesgos para la economía regional
VALLADOLID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
La economía de Castilla y León crece a un ritmo "más lento" que el mantenido en los anteriores trimestres, algo que el Colegio de Economistas de Valladolid (Ecova), ha achacado a la caída de las exportaciones y a las incertidumbres internacionales que afectan a la confianza de los mercados, como la negociación de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit) o el proteccionismo económico de Estados Unidos promovido por su presidente, Donald Trump.
Esto, junto con la convocatoria del referéndum secesionista en Cataluña, contribuye a que en el segundo trimestre del año se haya producido un parón tanto en la actividad industrial, como en la generación de empleo indefinido o en la subida de salarios, tal como ha destacado el decano presidente de Ecova, Juan Carlos de Margarida, durante la presentación de la última entrega del Observatorio Económico de Castilla y León.
En declaraciones recogidas por Europa Press, De Margarida ha insistido en que la economía castellanoleonesa "sigue creciendo" y, pese a las señales de "desaceleración", ha puntualizado que un menor dinamismo no implica necesariamente algo malo, pues "es bueno que la economía se asiente" una vez recuperada de la crisis.
En cuanto al freno de la actividad industrial, el "motor que tira de los demás sectores", el responsable de los economistas vallisoletanos ha advertido de que puede tratarse de algo "coyuntural", pero sí ha subrayado "riesgos importantes" para la economía de la Comunidad, como podría ser un agravamiento de la tensión con Cataluña y la evolución demográfica negativa de Castilla y León.
Respecto a lo primero, Juan Carlos de Margarida ha asegurado que de prolongarse la inestabilidad política en Cataluña podría producirse un encarecimiento de las cargas financieras, aunque ha subrayado que "hoy por hoy los inversores siguen tranquilos".
En cuanto a la evolución demográfica de la región, el presidente de Ecova ha recordado que en la última década Castilla y León ha perdido un cuatro por ciento de sus habitantes, con una población envejecida y una alta emigración de jóvenes, lo que repercute en una mayor tasa de ahorro y menor inversión privada asociada a los comportamientos propios de gente mayor frente a los jóvenes.