VALLADOLID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha alertado de la "incomprensible dejadez de años y grave abandono" de la Junta de Castilla y León en la protección del consumidor y ha reclamado una actualización integral de este servicio.
En un comunicado remitido a Europa Press, CSIF ha recordado que las competencias de este servicio son "exclusivas de la Administración autonómica desde hace nueve años" y ha pedido tanto al consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, como a la directora general de Consumo, María Pettit, que "ejerzan su responsabilidad, velen adecuadamente por la seguridad, la salud y los intereses económicos del consumidor y lleven a cabo la esperada actualización integral de un servicio importantísimo para los ciudadanos que sigue olvidado".
El sindicato ha indicado que el año pasado se hicieron un total de 200 tomas de muestras de productos que pudieran ser inseguros, cuando hasta 2017 superaban las 1.000, es decir, cinco veces más. Las muestras se envían al laboratorio de Barajas, en Madrid, que, según subraya CSIF, actualmente "carece de efectivos suficientes", sin haber "un sólo laboratorio en toda Castilla y León para dar soporte a los inspectores de Consumo como sí hay en otras comunidades".
"Como ese laboratorio madrileño no admite más muestras, tampoco se hacen más controles de productos", lamenta CSIF, que subraya que la falta de personal de la Inspección de Consumo está haciendo que la red de alerta de productos industriales "no esté operativa ni fines de semana ni a partir de las 15.00 horas".
Asimismo, CSIF recalca que se perjudica "de forma muy importante" al mundo rural, pues "no puede ser protegido en igualdad de condiciones que en las capitales de provincia" y tilda de intento de "camuflar la falta de personal" el convenio con la Guardia Civil para atender estas zonas.
En cuanto a este periodo navideño, CSIF advierte de que no se ha he hecho una campaña específica de vigilancia en el Black Friday, en la que se compruebe que, efectivamente, no se han subido previamente los precios para rebajarlos esa semana, lo que "constituiría un fraude y competencia desleal para aquellos comercios que son honestos con los consumidores".
También critica que la denominada campaña de 'guirnaldas luminosas' (el control de los adornos navideños luminosos que se colocan en los árboles de Navidad y otros espacios) este año empezará en enero en algunas provincias, lo que resulta "un total disparate".