La CHD trabaja para "garantizar el recurso" a pesar de "las complicaciones de la actual campaña de riego"
VALLADOLID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El desarrollo meteorológico de los últimos meses, sin precipitaciones y con temperaturas muy elevadas en la cuenca del Duero, se ha traducido en un empeoramiento de la situación de reservas de agua embalsada, que con un total de 1.381,6 hectómetros cúbicos --un 48 por ciento del total, once puntos menos que la media de la década--, registra actualmente "el peor dato de los últimos cinco años".
Así se ha constatado en el transcurso de la reunión de la Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) reunida este jueves de manera extraordinaria en la sede del organismo en Valladolid.
La peor situación se encuentra en el embalse de Villameca, al 22 por ciento de su capacidad total, frente al 51 de los últimos diez años; el sistema Pisuerga y el sistema Carrión, cuyas reservas a fecha actual son inferiores al 50 por ciento de la media de reservas de la última década.
En situación desfavorable se sitúan los sistemas Órbigo y Alto Duero, estando más controlada en los sistemas Esla y Arlanza, y los embalses de Linares del Arroyo, Pontón Alto, Castro de las Cogotas y Santa Teresa, tal como ha señalado la CHD a través de un comunicado.
Tal y como se ha informado en la Comisión de Desembalse y en las Juntas de Explotación celebradas con los regantes las últimas semanas de julio y primera de agosto, la CHD "está trabajando para garantizar el recurso", a pesar de "las complicaciones de la actual campaña de riego en la mayoría de sistemas".
En la Comisión también se ha informado sobre el cumplimiento del Convenio de Albufeira, que establece el marco de colaboración entre España y Portugal para la gestión de las aguas de la demarcación hidrográfica del Duero.
Actualmente existe "un diálogo constante" con Portugal, recalca la Confederación, para atender el régimen anual establecido, lo que se ha traducido en "fuertes restricciones" en la zona española en algunos sistemas de explotación, pero que puede suponer mayores limitaciones en lo que queda de año hidrológico para "atender este compromiso" con el país vecino.
Actualmente, la Dirección General del Agua está trabajando con la administración hidráulica portuguesa para establecer una planificación para los meses de agosto y septiembre, han precisado las mismas fuentes.