Los consejeros advierten al comisario de Medio Ambiente de los "datos erróneos" del Ministerio para la inclusión de la especie en el LESPRE
SANTANDER/VALLADOLID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
Castilla y León, Cantabria, Asturias y Galicia han trasladado al comisario europeo de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, su preocupación por las consecuencias que tendrá en estas comunidades autónomas la inclusión del lobo ibérico en el Listado de Especies de Protección Especial (LESPRE), y han destacado que el estado de conservación de esta especie "es favorable en España".
En la reunión, que se ha celebrado por videoconferencia, han participado los consejeros de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de Cantabria, Guillermo Blanco; de Medio Rural y Cohesión Territorial de Asturias, Alejandro Calvo; de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda de Galicia, Ángeles Vázquez.
El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, en su nombre y en el de los consejeros homólogos de Galicia, Asturias y Cantabria, ha trasladado por videoconferencia al comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca de la UE, Virginijus Sinkevicius, las razones de su rechazo a la inclusión del lobo en el LESPRE (Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial), por entender que el modelo de gestión que se estaba llevando a cabo desde 2005 en estas comunidades autónomas, mantenía un equilibrio entre lobo y ganadería extensiva y ha dado resultados satisfactorios en la población del lobo, que se ha venido incrementando en el norte del Duero, donde la Unión Europea permitía la caza. Un incremento que ha desplazado población lobera al sur del Duero.
Asimismo, ha hecho llegar al Comisario Europeo lo erróneo de las conclusiones remitidas por el gobierno de España a dicha Comisión sobre que la evolución de la población del lobo en España es desfavorable en el período 2013-2018, cuando los datos técnicos de las cuatro Comunidades Autónomas avalan lo contrario y, además, es de público conocimiento.
Los consejeros de las cuatro comunidades, que albergan a la mayoría de ejemplares de este especie en España, han explicado que los exhaustivos informes que han elaborado demuestran que "el lobo al norte del Duero disfruta de un estado de conservación favorable", ya que tanto la evaluación de la dinámica de las poblaciones como el área de distribución y la calidad del hábitat para la especie "resultan a todas luces favorables", lo que hace "incomprensible" la decisión del Ministerio de Transición Ecológica incluir el lobo en el LESPRE.
Unos informes que remitieron al Ministerio para elaborar el informe sexenal (2013-2018) que cada estado miembro de la Unión debe remitir a la Comisión Europea. No obstante, tal y como han advertido a Sinkevicius, el Gobierno central "hizo su propia interpretación de las evaluaciones y datos de las comunidades, y trasladó a la UE conclusiones erróneas para justificar una decisión meramente ideológica y no avalada por la ciencia".
"Se modificaron criterios estadísticos que concluyeron el estado como desfavorable y desembocaron en esta situación", han señalado los consejeros, que han dejado claro que los seguimientos poblacionales que se realizan de manera continua en sus territorios, basados en metodologías aprobadas y validadas por la comunidad científica, son "la mejor información disponible".
Según han indicado, con los datos que manejan "queda patente que el estado biológico de la especie no justifica su inclusión en el LESPRE, sin perjuicio del valor cultural, científico y ecológico de la misma, lo cual es plenamente compatible con la gestión que se venía haciendo por las comunidades".
CRITERIOS HOMOGÉNEOS
Dado que "el cambio de parecer" del Gobierno central se basó en este error, los consejeros han aprovechado la reunión para solicitar al comisario europeo el establecimiento de criterios homogéneos a nivel supranacional para modular adecuadamente estas evaluaciones, que "condicionan de forma crucial a catalogación de una especie".
"El Gobierno central fue más allá de los requerimientos de las directivas europeas, en contra de las recomendaciones del Parlamento Europeo, generando problemas donde no debe haberlos, enarbolando cómo excusa el artículo 17 de la Directiva Hábitats y generando una desafección sobre la propia Comisión Europea que debemos revertir", han subrayado.
Asimismo, han recordado que, con carácter previo a la promulgación de la orden ministerial, la gestión del lobo se venía desarrollando en España en el marco legal establecido por la Directiva Hábitats de la UE y el Convenio de Berna, "cumpliendo plenamente con la normativa comunitaria y los convenios internacionales.
Finalmente, han hecho hincapié en el "perjuicio" que se causa a la inmensa mayoría de ganaderos y trabajadores agrícolas, "los principales afectados por los ataques y daños producidos por el lobo" y a los que preocupa que la nueva situación originada, "en lugar de facilitar la coexistencia y convivencia de la ganadería y el lobo, produzca el efecto contrario", han remarcado.
INTERMEDIACIÓN DE EUROPA
Por todo ello, los consejeros han solicitado al comisario que analice la situación, "toda vez que las decisiones han de estar basadas en los mejores datos disponibles y buscando acuerdos con las entidades y sectores afectados, algo que no ha ocurrido en esta ocasión".
También le han pedido la intermediación con el fin de recuperar "el consenso y el diálogo" que siempre ha caracterizado las relaciones entre las comunidades autónomas, como responsables de la conservación y gestión directa de la especie, y el Estado, con competencias en materia medioambiental.
Así, han solicitado que se tengan en cuentan los principios que sirvieron para aprobar de forma mayoritaria el plan de acción en pro de la naturaleza, las personas y la economía, especialmente vinculados a la resolución de conflictos sobre la coexistencia con los grandes carnívoros.
Asimismo, han reclamado que se salvaguarde el espíritu de colaboración institucional en la cogobernanza a todos los niveles admnistrativos, "buscando acuerdos con las entidades locales y los sectores afectados por las decisiones que se tomen y que han de estar siempre basadas en los mejores datos disponibles".
De igual modo, han destacado la necesidad de buscar consenso y participación en la toma de decisiones, lo que, en su opinión, "forma parte del núcleo de la gestión eficiente de los territorios y de los valores naturales y culturales que atesora".