Expresa su preocupación por la vulnerabilidad de menores migrantes en Canarias
BURGOS, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Delegación de Pastoral para las Migraciones y la Movilidad Humana de la Archidiócesis de Burgos ha expresado su preocupación por la "venta" de citas para solicitar protección internacional que obliga a los migrantes a "a hacer lo que sea para buscar esa cantidad de dinero que les piden".
Así lo ha expresado este jueves su resposnable, Hilda Vizarro, en la rueda de prensa de la presentación de la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado, donde ha advertido de que por estas citas en la Policía Nacional se reclaman pagos "de 150, 300 o 400 euros".
Estas personas que quieren pedir protección internacional se ven obligadas "a hacer lo que sea para buscar esa cantidad de dinero que les piden" y luego, las citas se las pueden dar "en cualquier parte de España", ha añadido.
"No entendemos cómo puede ser posible porque tú cuando pides una cita previa es con tu documento de identidad, con tu nombre y no sabemos cómo se hace esta venta de cupos", ha apostillado, para incidir en que se trata de una situación que ocurre "en Burgos y en toda España".
Asimismo, ha advertido de que cuando han buscado soluciones a esta realidad, la respuesta que han recibido por parte de las autoridades, dado que es una ilegalidad, es el deber de denunciar. "Ahí ha quedado. Hacer la denuncia y ya está, pero otra cosa más, más no se ha avanzado", ha lamentado.
Igualmente, ha subrayado que la Delegación de Migraciones ha advertido sobre situación en su en su Círculo de Silencio y en sus publicaciones, así como con la ayuda de otras entidades que prestan ayuda a las personas migrantes, que también han denunciado los hechos que los mismos afectados les transmiten "cuando lo pagan".
Por otro lado, Vizarro ha mostrado su preocupación por la situación de los menores migrantes que llegan a Canarias y que "son declarados mayores" pese a ser menores de edad, lo que en la Delegación de Migraciones notan a su llegada a Burgos, cuando "ya no se puede hacer nada".
Así, ha apuntado que estas personas se presentan a todas las organizaciones con sus partidas de nacimiento, con sus pasaportes que "dicen que son menores", y cuando se les intenta llevar donde les corresponde no les reciben porque "ya están fichados como mayores".