LEÓN 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Ecologistas en Acción de León ha animado este miércoles a "plantar cara con todos los medios disponibles" a los ayuntamientos que cuenten con proyectos de plantas de biogás o de las macrogranjas que estos últimos "incentivan".
La asociación ecologista, a través de un comunicado de prensa recogido por Europa Press, ha explicado que la producción de biometano a partir de deyecciones ganaderas para ser inyectado en la red gasista "beneficia al oligopolio energético y a las multinacionales cárnicas", en un proceso sinérgico que se retroalimenta con dinero público de los fondos Next Generation.
Para la formación, este sector constituye "una nueva burbuja especulativa que favorece la expansión de la ganadería industrial". "Prueba de ello", han continuado, "es que la Consejería de Medio Ambiente está redactando el Plan biogás 2024-2034, que prevé la implantación inicial de 63 plantas de biometano en CyL y, al mismo tiempo, admitiendo la incesante solicitud de autorización de nuevas macrogranjas, o ampliación de las que ya existen".
Actualmente se encuentran en información pública, en la web de la Junta, 16 expedientes de autorización de macrogranjas porcinas y cuatro de plantas de biogás. Dos de estos proyectos se sitúan en la provincia de León: una planta de biogás en Castropodame, que producirá biometano mediante la digestión anaerobia de 200.000 toneladas anuales de deyecciones ganaderas y otros residuos orgánicos que El Bierzo no genera; y una macrogranja porcina en El Burgo Ranero, admitida a trámite con la máxima capacidad que permite la ley y que producirá 15.700 toneladas anuales de purines.
Ecologistas en Acción ha aplaudido al Ayuntamiento de Castropodame que ha emitido un informe urbanístico negativo, de incompatibilidad de la planta de biogás con el planeamiento municipal. Este informe obligaría a la Junta a "poner fin al procedimiento y archivar el expediente". También han celebrado la actitud del Ayuntamiento de El Burgo Ranero que se ha manifestado en contra de la explotación porcina, y presentará alegaciones, según acuerdo adoptado el 18 de septiembre por el Pleno municipal.
En este último caso, al carecer de normas urbanísticas, El Burgo Ranero se rige por el planeamiento provincial y un posible informe de incompatibilidad urbanística tendría que emitirlo el SAM de la Diputación de León. No obstante, aseguran, "sobran argumentos para rechazar un proyecto que, situado en proximidad del Camino de Santiago, no dispone de captación de agua, ni de plan de gestión de purines".
EA ha reiterado en apoyar todas las iniciativas contrarias a estas propuestas mediante la presentación de recursos contra las autorizaciones ambientales, "si la Junta llegara a otorgarlas a pesar de las omisiones e incumplimientos alegados y a pesar de la oposición y el malestar expresado públicamente por los vecinos y las vecinas a las que representan".