BURGOS, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Estación Depuradora de Aguas de Burgos (EDAR) será la sede
elegida por Acciona para elaborar un innovador proyecto piloto destinado a capturar CO2 del biogás de la potabilizadora que posteriormente se transforme en un plástico biodegradable de uso alimentario con un coste de 7 millones de euros.
En la presentación de este nuevo proyecto han estado presentes el vicealcalde y responsable de Aguas de Burgos, Fernando Martínez-Acitores; Juan Antonio García Pastrana, gerente de Aguas de Burgos; José Flores, jefe de la planta EDAR Burgos, y Mar Mico, responsable del área de depuración e innovación.
El vicealcalde considera "una satisfacción para la ciudad que la EDAR sea elegida para este proyecto con fondos europeos que reafirma que la Sociedad de Aguas Municipal está haciendo las cosas
bien y de tener la mejor agua y una de las mejores de Europa".
"Se trata del desarrollo de una experiencia piloto para capturar el CO2", ha apuntado Juan Antonio Pastrana, quien ha explicado que al llegar la propuesta les pareció estupenda porque coincide con la línea de trabajo" de Aguas de Burgos, pues no solo "coincide con la línea de mejorar cada vez más el agua sino en el plano social con proyectos de investigación".
El proyecto se conoce con el nombre de 'Hiccups' y aparte de tener
el objetivo de capturar el CO2, se busca generar combustible para
autoabastecer la planta.
"El metano se quema y el CO2 no tiene uso, así que se va a
convertir en bioplásticos que pueda usarse en industria alimentaria, en
este caso para cubrir los envases de un solo uso", ha señalado Mar
Mico, quién forma parte de un proyecto que acaba de empezar y que tiene
previsto acabar en agosto de 2026.
El proyecto surge por la colaboración de distintas administraciones y empresas y está formada por 12 socios de cinco países y tiene un coste de 7 millones de euros. En Burgos únicamente se va a
llevar a cabo la captura de CO2 y su conversión se hará por otro de
los socios del proyecto.
"Con este proyecto hay dos líneas, una la recogida de CO2 puro que
se va a destinar para la generación de bioplásticos, y otra de metano
concentrado que va a permitir asemejarse al gas natural", ha comentado
Mar Mico, quién se ha aventurado a calificar de "impacto muy fuerte"
este proyecto innovador puesto que "se puede producir energía renovable
muy importante para la transición ecológica de Europa" como ocurre con
el metano y que va a permitir reducir parte de la dependencia de
combustibles fósiles.
Mico también ha señalado que se contribuye a la eliminación del
mercado de productos de un solo uso como se recoge en la Agenda 2030,
concretamente en el ODS 12, y la unión de todas estas administraciones,
vista como alianza se vincula al objetivo 12 de alianza por el
progreso.
Como han señalado, el proyecto acaba de arrancar y se están
llevando a cabo las analíticas y atendiendo a los requerimientos de los
tecnólogos, pero Mica ha apuntado que aunque "la planta de Burgos es muy pequeña el objetivo es poder recoger 150 kilos de CO2".