Frontal oposición del comercio salmantino al "improvisado" plan energético del Gobierno

Publicado: martes, 2 agosto 2022 13:15


SALAMANCA, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Empresarios Salmantinos de Comercio (AESCO), integrada en CES, contempla con "estupor" el plan energético aprobado por el Gobierno de Pedro Sánchez y muestra su rotunda disconformidad con el nuevo paquete de medidas adoptadas, entre las que destaca que la temperatura del aire acondicionado en verano no pueda ser de menos de 27 grados en los comercios, mientras que la calefacción no podrá superar los 19 grados.

AESCO, consciente de que ahorrar energía es prioritario y una tarea de todos y de que reducir la factura energética es primordial en los tiempos actuales, sostiene que esta obligatoriedad del Ejecutivo a los establecimientos comerciales de regular los termostatos de esta manera para ahorrar energía es una decisión contraproducente e improvisada, al no haber tenido en cuenta para fijar estas temperaturas, tanto en invierno como en el periodo estival, ni el territorio ni las circunstancias de cada establecimiento, lo que, a su juicio, puede perjudicar seriamente la afluencia de clientes en el mismo durante el año.

Otras medidas contempladas en el Plan como obligar a los locales comerciales a dotarse de sistemas de cerrado automático de puertas cuando esté encendido el aire o la calefacción antes del 30 de septiembre de este año, que éstos instalen termómetros que informen de la temperatura del espacio o que expliquen las acciones que van a tomar al respecto en carteles informativos "no son más que despropósitos del Gobierno, que ponen una vez más la soga al cuello a los comerciantes".

MEDIDAS QUE REQUIEREN INVERSIONES

"Todas estas medidas requieren de inversiones por parte del comerciante, que con la delicada coyuntura económica actual son inasumibles, y más en un contexto en el que el consumo no ha conseguido recuperarse", recalca el presidente de AESCO, Benjamín Crespo.

Por otro lado, la asociación considera un "disparate" que se obligue a los comercios a apagar las luces de los escaparates a las diez la noche, cuando éstas son un reclamo de atención para los viandantes y dan seguridad a las calles.

"Es importantísima la iluminación en los escaparates porque son el primer punto de contacto visual que tiene una comercio y que nos ayuda a atraer a clientes a nuestro punto de venta. Y, además, y fundamental, las calles en las que no hay comercios o éstos no están iluminados producen inseguridad y sensación de vacío en el entorno", añaden.

Por tanto, AESCO lamenta la "improvisación" del Gobierno al respecto y ante esta situación "inaceptable" pide un 'Plan B' en materia energética con medidas sensatas para los comercios y efectivas para lograr realmente la eficiencia y el ahorro energético.

Ante el objetivo común de ahorrar energía, AESCO apela a racionalizar los horarios de encendido y apagado de las instalaciones de climatización, ventilación, agua caliente, iluminación o del equipamiento ofimático en los comercios, pero insiste en que las actuales medidas que se han fijado para mejorar la eficiencia energética son contraproducentes, y mellan los bolsillos de los comerciantes que atraviesan un situación tremendamente complicada.

"El comercio siempre ha demostrado madurez y responsabilidad social, como ha quedado reflejado durante la pandemia, y siempre está dispuesto a colaborar, pero no queremos ser siempre los mismos los que paguemos los platos rotos, mientras se despilfarra en otros ámbitos", concluye la asociación empresarial.

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