Auxiliada una familia tras el cierre accidental de un vehículo con un bebé en su interior en Cabezón

VALLADOLID 27 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil de Valladolid ha procedido a dar auxilio a una familia tras el cierre accidental de su vehículo con un bebé en su interior, en un área de descanso en el término municipal de Cabezón de Pisuerga.

El suceso se produjo en la tarde de este jueves cuando una patrulla se encontraba realizando servicio propio de la especialidad en las inmediaciones de un área de descanso, de la autovía A62, en el término municipal de Cabezón, donde fueron requeridos por dos ciudadanos, un hombre y una mujer, quienes solicitaban su ayuda de manera urgente.

La mujer, madre de un bebé de doce meses, explicó que, tras haberse detenido temporalmente para descansar, el vehículo se cerró accidentalmente, debido al fuerte viento que hacía, dejando las llaves en su interior y el menor atrapado dentro.

Ante la delicada situación y la corta edad del niño, los agentes activaron inmediatamente los protocolos pertinentes y realizaron gestiones con el servicio de asistencia en carreteras, evaluando si era posible abrir el vehículo desde el exterior sin causar daños.

Paralelamente, la Guardia Civil se preparaba para fracturar uno de los cristales del coche si la intervención se dilataba en el tiempo, dado el riesgo de deshidratación del bebé.

Aproximadamente 15 minutos después del aviso, una grúa del servicio de asistencia en carretera se personó en el lugar. Gracias al uso de dilatadores y otras herramientas, se consiguió abrir el vehículo con éxito, sin necesidad de romper ventana alguna, y se comprobó que el menor se encontraba con síntomas de agotamiento por el calor, pero aparentemente en buen estado de salud.

Ante ello, le suministraron agua y fue tranquilizado por la madre, a quien los agentes interpelaron sobre si necesitaba algún tipo de ayuda más. Una vez que la progenitora se quedó tranquila, la ocupante del turismo continuó su viaje en compañía de su hijo.

La rápida actuación de la Guardia Civil y la coordinación con el servicio de asistencia fueron claves para resolver esa situación de forma segura y evitar daños.