Guiraudie analiza la moral y el deseo en 'Misericordia': "Es el gran misterio de la vida"

   El séptimo largometraje del cineasta francés se estrena en España en el marco de la 69 Seminci

   VALLADOLID, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El cineasta francés Alan Guiraudie analiza la naturaleza humana en su séptimo largometraje, 'Misericordia', un singular thriller, con toques de humor negro, en el que aborda la homosexualidad, la moral, la religión y el poder del deseo en el contexto rural de un pueblo de la región francesa de Occitania.

   "El misterio es el gran motor de la película y el deseo es el gran misterio de la vida", ha reflexionado el director en una rueda de prensa posterior a la proyección de su cinta, en estreno nacional, en el marco de la 69 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), donde compite en Sección Oficial.

   'Misericordia', presentada en la sección Première del Festival de Cannes, introduce su historia con el regreso de Jérémie (Félix Kysyl) a su pueblo, Saint-Martial, para asistir al funeral del panadero para el que solía trabajar.

   Esta visita remueve asuntos del pasado mientras el joven se instala en la casa de la viuda Martine (Catherine Frot), lo que despierta las suspicacias del hijo del fallecido, Vicent, antiguo amigo de Jérémie, quien también guarda relación con otras personas del pueblo.

   La desaparición de uno de los personajes instala una atmósfera de sospecha en el lugar, a donde acuden las autoridades para investigar lo sucedido, un punto en el que la historia cambia del suspense inicial a la comedia, con diálogos de humor negro que, principalmente, comprometen al cura del pueblo (Jacques Develay).

   En 102 minutos de duración, Guiraudie expone una serie de hechos inesperados que se desarrollan en este pueblo de la Occitania, región del mismo director. Así, se puede ver un núcleo rural vaciado y rodeado por un bosque en época de otoño, donde el verde se mezcla con el naranja, marrón y amarillo, un espacio que acoge los momentos más sorprendentes de este filme que, ante todo, reflexiona sobre la moral y el deseo.

   El cineasta francés estrena así una adaptación de su novela 'Melancolía'. En este libro, ha detallado, "un hombre asesina a otro, aparece un bosque y suceden cosas extrañas", tal como ocurre en la película, que plasma así "una concepción muy particular sobre toda la moral que rodea la historia", con "cierta banalidad".

   En relación con adaptar su obra, ha explicado que siempre ha tenido una relación de "ida y vuelta" entre el cine y la literatura, que "no son lo mismo", y ha detallado que en esta ocasión ha optado por construir una historia más cercana que la de su libro, donde la historia que cuenta "se diluye en otras intrigas".

   Por otro lado, cuestionado por las comparaciones entre 'Misericordia' y el 'Teorema', de Pasolini, el directo ha afirmado sentirse "sorprendidos" por estas opiniones ya que considera que "No tienen nada que ver" y que serían "lo contrario". "En el 'Teorema', el personaje se acuesta con todos los miembros de la familia. Aquí el deseo nunca llega a término", ha defendido, para incidir que en que tampoco le gusta hacer películas "sobre la burguesía".

RELACIÓN ENTRE DESEO Y MIEDO

   Sobre la temática del deseo en su obra, Guiraudie ha reconocido que siempre pretende mostrar la "relación entre el deseo y el miedo", lo que encarna en distintos personajes de este filme, que también refleja la "frialdad" o "la ausencia de culpabilidad".

   Esto se nota en el papel de Jérémie, quien, ha valorado el director, hace un personaje "cínico y frío", como se espera; mientras en el papel de Martine, Catherine Frot ha conseguido esa "cndidez" necesaria de la madre que interpreta. El cineasta ha reconocido que en un principio tuvo un "poco de miedo" por el hecho de que se tratase de una actriz conocida, lo que podía "fagocitar el personaje".

   Así ha resaltado que el casting es "el 80 por ciento de la película", en la que también tiene un papel fundamental el párroco, en el que ha "idealizado la figura de un cura", según ha subrayado Guiraudie. "Pienso en un cura de unos preceptos morales muy grandes, pero que por otro lado también siente ese deseo que le cuesta controlar", ha apuntado.

"REFUGIO" PARA LA HOMOSEXUALIDAD

   En este contexto, ha ahondado que se ha decidido incluir un cura porque el sacerdocio ha servido de "refugio" para hombres homosexuales, "sobre todo en el campo". "Para un joven que era homosexual, que no tenía deseo por las mujeres, que no quería tener niños, los ideal fue vivir su homosexualidad, o asexualidad, en la Iglesia, ser curas", ha afirmado, para añadir que concibe a los párrocos como una "figura central de un pueblo", ya sea por "respetado" o ser la "burla" de la gente.

   Por otro lado, el cineasta ha resaltado que la película, que cuenta con la complicidad de Albert Serra y Montse Triola (Andergraun Films) en la producción, se desenvuelve en un bosque porque son lugares en los que se siente "cómodo". A partir de este espacio y lo rural, realiza una "representación fantasmal entre el campo de la actualidad y el de su infancia".

   Además, para ejecutarla ha llevado a cabo una investigación de la temporalidad, lo que ha resultado en una cinta que podría transcurrir "entre los 70 y la actualidad", una "película atemporal" en la que se han evitado elementos que "marcan la época", como los teléfonos móviles. Guiraudie ha elegido así la "intemporalidad" para crear una dimensión de "cuento".