VALLADOLID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El procurador de Ciudadanos en las Cortes de Castilla y León, Francisco Igea, ha señalado este domingo la necesidad de refundar el partido y ha reconocido que la situación "es mala", dado que las últimas cuatro encuestas les dan por debajo del cuatro por ciento de la intención de voto.
Sin embargo, ha recalcado que el espacio político para crecer "existe" y es "más necesario" que nunca, "sobre todo" en una Comunidad que puede ser la primera experiencia de lo que puede ocurrir en el país para "evitar la polarización y evitar el populismo de izquierdas y de derechas".
A este respecto, Igea ha subrayado que Castilla y León es la primera Comunidad Autónoma gobernada por el "populismo de derechas" y "todos los días se ven las consecuencias cuando se ve al Gobierno insultar y acosar a la prensa, con un Parlamento que se salta las normas, de modo que es importante que Ciudadanos logre mantener el respeto a las normas y el Estado de Derecho".
Por esta razón, "no hay nada mejor que un abogado del Estado" -en relación con Edmundo Bal- en un momento en el que el país "se está jugando mucho", por lo que es "fundamental" que se tomen determinadas decisiones para evitar abalar a quienes utilizan en nacionalismo populista y el enfrentamiento para "negar la legitimidad democrática a medio país, algo que hacen unos y otros".
En este sentido, el líder liberal ha recalcado la "necesidad" de que Ciudadanos defienda los derechos del hombre en todo el mundo y por ello la candidatura de Edmundo Bal a la portavocía del partido "es la mejor" pero también son "todos necesarios", de modo que cuando todo acabe "habrá que tender la mano a aquellos que tengan otros puntos de vista".
Asimismo, ha reconocido que las primarias son un proceso "duro" y ha ironizado sobre que es un especialista en ello, dado que en Ciudadanos "solo quedan los traidores" y lo que quiere es que los de un lado y otro "echen el resto en el proyecto político".
De esta forma, se ha expresado Francisco Igea en declaraciones a los medios antes de participar en un acto de partido junto a los militantes de la formación naranja en su sede de la céntrica calle Santiago de Valladolid para apoyar la candidatura de Edmundo Bal.