VALLADOLID, 2 May. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León estudia incluir Zamora como zona indemne de brucelosis bovina y se uniría a las provincias de Burgos, Soria y Valladolid reconocidas ya por la Unión Europea como oficialmente indemnes de esta enfermedad zoonótica.
Así lo ha anunciado el director general de Producción Agropecuaria e Infraestructuras Agrarias, Jorge Llorente, quien, tras recordar que el pasado año no se detectó ninguna explotación positiva de brucelosis bovina en la Comunidad, "primera vez" que se da este hecho, ha avanzado que la Junta trasladará a la UE la inclusión de Zamora entre las provincias oficialmente indemnes desde el convencimiento de que está "por el buen camino".
Dicho esto, ha aclarado que en sanidad animal no existe el riesgo cero por lo que ha abogado por seguir trabajando en el control y erradicación de este tipo de enfermedades animales ya que, en el caso de la brucelosis y de la tuberculosis, limitan el movimiento.
En este sentido, ha expresado su "preocupación" ante la mayor prevalencia de estas enfermedades zoonóticas en comunidades como Extremadura, Cantabria o Andalucía con las que se mantiene un intercambio comercial a lo que ha añadido el hecho de que la UE califica a los países en su conjunto y no por comunidades.
Llorente ha achacado el "éxito" de las campañas de saneamiento ganadero en Castilla y León al trabajo del propio sector y a la "rigurosidad" e "independencia" en la aplicación de los programas de modo que los positivos en tuberculosis bovina afectaron sólo el pasado año al 1,87 por ciento de las explotaciones.
Según sus datos, el número de explotaciones positivas de tuberculosis bovina ha disminuido en los últimos diez años un 55 por ciento en Castilla y León, bajada más pronunciada en las provincias de Salamanca, Segovia y Zamora. Llorente ha destacado la evolución favorable en las explotaciones de aptitud cárnica en régimen extensivo de la Comunidad, ya que el número de explotaciones positivas en este tipo de rebaños, en los últimos diez años, ha descendido en un 57,1 por ciento.
El director general ha significado la relevancia de estos resultados sanitarios en la cabaña ganadera bovina, ovina y caprina de Castilla y León ya que permite una mayor rentabilidad y competitividad de las explotaciones en cumplimiento de la normativa de seguridad alimentaria de la UE, la más exigente del mundo.
A modo de ejemplo, ha explicado que el 81 por ciento de los cebaderos de Castilla y León pueden acceder en la actualidad a todos los mercados internacionales sin realizar pruebas previas de tuberculosis, "lo que permite una flexibilización de movimientos como demanda el sector" en lo que ha considerado un "valor añadido" para la exportación que garantiza, además, unos "precios razonables" en productos como el vacuno de carne y el porcino.
Llorente ha hecho estas declaraciones tras firmar este martes un convenio con el Consejo de Colegios de Veterinarios de Castilla y León para gestionar la base de datos de la receta electrónica y elevar así los controles sanitarios. Para ello, la Junta encomendará a los veterinarios la implantación de una base única de datos de recetas expedidas para las explotaciones ganaderas de la Comunidad que facilitará la trazabilidad de la dispensación de los medicamentos.
A esta medida se suma la receta veterinaria electrónica regulada a través de una orden publicada este mismo martes en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) que permitirá su emisión desde una plataforma informática, una "aplicación muy rigurosa" que se traducirá en una base de "datos fiables" sobre el consumo real de medicamentos con "información puntual, ágil y actualizada" de la correcta prescripción de medicamentos veterinarios, como es el caso del consumo real de antibióticos y de otras sustancias medicamentosas.
A esto se suman otras ventajas como el establecimiento de medidas eficaces de reducción del riesgo en las producciones ganaderas y el desarrollo de resistencias a los antimicrobianos y la posibilidad de un control oficial más eficiente junto a medidas eficaces ante posibles usos ilegales de medicamentos.
"Todo esto redundará en un control más eficaz de todos los agentes implicados que asegure la trazabilidad y el uso racional de los medicamentos veterinarios, con el fin de obtener animales sanos y productos de origen animal con el mayor nivel de sanidad animal y seguridad alimentaria", ha defendido Llorente.
Por su parte, el presidente del Consejo de Colegios de Veterinarios, Luciano Díez, ha destacado la importancia de la nueva herramienta en el ejercicio de la profesión veterinaria.