VALLADOLID 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León ha invertido 575.000 euros en la compra de equipos y material fungible necesarios para realizar las pruebas analíticas (PCR) de detección de lengua azul, que permitieron el movimiento de animales ubicados en las zonas que la Dirección General de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación calificó como zonas restringidas frente a los serotipos 1 y 8 dentro de la Comunidad en su resolución del pasado 15 de octubre.
Estos análisis se establecieron como base para lograr que los titulares de las explotaciones ganaderas ubicadas en dichas zonas, que en este caso fueron las comarcas de El Barco de Ávila, Arenas de San Pedro, Candeleda, Piedrahíta, Navarredonda de Gredos, Navaluenga, Sotillo de la Adrada, El Barraco, Cebreros, Las Navas del Marqués y Ávila, en la provincia de Ávila; y las de Béjar, Ciudad Rodrigo, Guijuelo, Tamames y Sequeros, en la de Salamanca, pudieran obtener la autorización para realizar el traslado de sus respectivas cabañas, detalla la Consejería a través de un comunicado.