Preside junto a Puente el acto inaugural de la nueva Avenida de Miguel Ángel Blanco en la capital
VALLADOLID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo y hermana del concejal de Ermua (Vizcaya) asesinado por ETA en 1997 Miguel Ángel Blanco, María del Mar Blanco, ha agradecido la contribución de Valladolid a la construcción de una "relato de la verdad frente a la mentira", de la "memoria frente al olvido" y de la "justicia frente a la impunidad" que promueven aquellos que pretenden "blanquear" lo que fue la banda terrorista.
Así lo ha señalado durante el acto de inauguración de la nueva Avenida de Miguel Ángel Blanco que se ha celebrado este viernes en Valladolid, después de que el pasado mes de julio --cuando se cumplieron dos décadas del asesinato del edil 'popular'-- se aprobara un decreto de Alcaldía por el que esta vía pasaba a asumir su nombre y abandonaba el de José Luis Arrese, ministro durante el régimen de Franco.
En declaraciones recogidas por Europa Press, María del Mar Blanco ha señalado la "unanimidad" que presidió esta decisión en el Ayuntamiento de Valladolid como "ejemplo" para otros consistorios que "se negaron a recordar y homenajear" a una víctima del terrorismo como su hermano, un "símbolo de libertad" y de la "unidad de los demócratas para la derrota del terrorismo" que dio paso al llamado "espíritu de Ermua".
Tras defender que "su sacrificio permanecerá en la memoria de los ciudadanos", ha recordado cómo con su secuestro y asesinato "el silencio dio paso a un grito sostenido de libertad". "Por primera vez perdimos el miedo, nos hicimos fuertes y conseguimos ganar la calle", ha señalado Blanco, quien ha añadido que recordar a su hermano es "recordar al conjunto de las víctimas".
Instantes antes de descubrir la placa con el nombre de Miguel Ángel Blanco, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha recordado que de no habérsele "arrancado miserablemente la vida a los 29 años", el que fuera concejal en Ermua cumpliría 50 años en mayo próximo y se ha felicitado por que a la hora de aprobar este homenaje --cuyo germen está en una iniciativa del edil 'popular' Borja García Carvajal-- en la Corporación no se produjeran "polémicas incomprensibles" en otras ciudades.
SÍMBOLO
"La sociedad elige sus símbolos, en este caso un concejal que no necesitaba vivir de la política, pero que decidió servir en una tierra donde vincularse al PP o al PSOE era jugarse la vida", ha enfatizado el regidor vallisoletano, quien ha recordado que el mismo año en el que asesinaron a Miguel Ángel Blanco "ETA mató a otras once personas", entre ellas un magistrado del Tribunal Supremo, un empresario, tres policías nacionales, un psicólogo de la cárcel de Martutene en San Sebastián, un guardia civil, otro concejal 'popular', un ertzaina, un peluquero y un vendedor de bicicletas.
Además, Puente ha señalado que tras esto "aún tuvieron que pasar 13 años y morir 57 personas más para que el terrorismo de ETA llegase a su fin".
Por último, el alcalde ha dejado claro que con el acto de este viernes se busca rendir homenaje no sólo a Blanco, sino "a las 857
víctimas mortales de ETA a lo largo de su vergonzante historia".