Marta Lallana articula en 'Muyeres' un viaje "poético y musical" sobre las guardianas de leyendas y cantares asturianos

La cineasta zaragozana Marta Lallana, directora de 'Muyeres' que se presenta este lunes en la Seminci, durante una entrevista concedida a Europa Press
La cineasta zaragozana Marta Lallana, directora de 'Muyeres' que se presenta este lunes en la Seminci, durante una entrevista concedida a Europa Press - EUROPA PRESS
Publicado: lunes, 23 octubre 2023 17:00

   La música del filme "salvaguarda" los cantares y romances y hace un uso formal del blanco y negro para "retratar" la sensación del olvido

   VALLADOLID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

   La joven cineasta Marta Lallana (Zaragoza, 1994) articula en 'Muyeres', su primer filme en solitario, un viaje "poético y musical" sobre las últimas guardianas de una tradición muy antigua, que es la transmisión oral de cantares, romances y leyendas que se lleva traspasando desde hace más de 500 años en aldeas y en un entorno "muy concreto" en la región asturiana.

   En una entrevista concedida a Europa Press, la cineaste ha subrayado que el largometraje, que se presenta este lunes en la 68 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) tras haberse alzado con el Premio del Gran Jurado en el Festival de Shanghái, es un proyecto de género "híbrido" porque mezcla la realidad con la ficción.

   "A la vez es un viaje poético y musical", ha remarcado Lallana, puesto que retrata la historia de Carmina, que es el personaje de Constantina, y las hermanas Irene y Elena. Pero 'Muyeres' es también es una historia de tramas cruzadas con Raül Refree como conductor, que es el músico, el compositor de la película.

   En relación con el nacimiento de la película, el momento en el que surge la idea de abordar esta cuestión, Lallana ha señalado que esto se produce cuando Refree estaba trabajando con el músico asturianno Rodrigo Cuevas en 2019 en 'Manual de Cortejo'.

   La directora ha explicado que Refree conoció allí a todas estas mujeres y los dos habían trabajado ya en 'Ojos negros', su primer largometraje. "Raül me dijo que me iba a fascinar un montón, que creía que ahí había una película y fue así como me empecé a meter en todo este mundo y a conocer toda esta tradición, que es súper desconocida, pero fascinante", ha añadido la cineasta.

CINTA "HÍBRIDA"

   En cuanto al apartado estético de este proyecto "híbrido", la responsable de 'Muyeres' ha explicado que tomó la decisión de rodar la película en blanco y negro desde que supo cómo iba a ser la película, porque para ella hubo un "cambio" entre lo que pensaba que iba a ser la cinta y cuando hizo su primer viaje de investigación a Asturias.

   La directora ha detallado que allí descubrió que la mayoría de mujeres que esperaba encontrarse, porque había hecho una especie de casting previo, habían fallecido o estaban muy enfermas y todo el mundo le dijo que tendría que "haber llegado diez años antes", por lo que este filme ahora "no se puede hacer".

   Fue ahí cuando surgió la idea de intentar transmitir la sensación de sentir que se "llegaba tarde", ha aseverado Lallana, dado que precisamente era eso lo que "quería transmitir y retratar, la sensación de que la historia se estaba escapando de las manos", que es "un poco la esencia de la película".

   Para Marta Lallana ese viaje, que fue "bastante triste", porque fue un "choque de realidad", marca el momento en el que empezó a pensar en rodar la película en blanco y negro. "No sé si fue por melancolía o porque de esta manera 'Muyeres' tenía más dramatismo", ha apostillado.

   Precisamente, ha explicado la joven cineasta zaragozana de 29 años, también al final del filme, el cual tenía "muy claro", hay un juego formal entre color y blanco y negro y entonces "esto tenía todo el sentido".

   Preguntada por esa sensación de "llegar tarde" para contar este tipo de historias que se enmarcan en el mundo rural y que reivindican la figura femenina, Marta Lallana ha apuntado "no creer" que sea tarde para reivindicar a las mujeres en el mundo rural.

   No obstante, sí que ha señalado que es "tarde" para las mujeres representadas en la película, en tanto en cuanto son las últimas informantes vivas de esta tradición. Por ello, Lallana ha hecho énfasis en que Carmina Iriarte, que interpreta al personaje de Constantina, es la última mujer viva en la península ibérica que a día de hoy está registrada como que sabe un romance que se llama 'Blanca, Flor y Filomena, que tiene más de 500 años".

   "Entonces, a eso me refería con llegar tarde, porque al final la transmisión es una cosa que ya ha dejado de tener la línea de sucesión", ha precisado.

PAPEL DE LA MÚSICA

   En el apartado musical del proyecto, la directora de 'Muyeres' ha señalado que tanto ella como Raül Rrefree tenían "súper claro" que con la música y con la propia cinta querían llevar al gran público la cultura popular, lo que significa juntarte en el pasado para cantar y contar historias.

   Para ambos era "muy importante" traspasar eso a la propia película, ha mencionado la cineasta, al tiempo que ha subrayado que en eso consiste, precisamente, "un poco el arte de contar historias hoy en día".

   Entonces la música, en ese sentido, al final lo que está haciendo es "salvaguardar un poco todas estas canciones, todos estos romances antiguos, pero llevándolos a un punto de vista contemporáneo y que le dan más continuidad".

   Tomando como escenario las montañas asturianas de Cangas de Narcea, el filme se centra en un lugar donde el tiempo se detiene. Allí, entre lo real y lo fantástico, habitan mujeres que conservan viejos cantos, monstruos enmascarados que bailan bajo la luna y numerosas leyendas que se cuentan alrededor de la lumbre.

   Un día, un visitante llega a la aldea con un aparato de grabación que tiene registrados los antiguos cantos de esas mujeres.

SEGUIR HACIENDO CINE

   Marta Lallana participó en la 64 edición de la Seminci con 'Ojos negros', su primera cinta, en la sección 'Spanish Cinema', vuelve ahora a la 68 edición del festival a 'Punto de Encuentro' y opta a la Espiga Verde por el marcado carácter medioambiental de la película.

   A este respecto, la directora de 'Muyeres' ha confesado sentirse "muy feliz", dado que tiene un "muy buen recuerdo" de Valladolid, razón por la que se ha mostrado "sorprendida" de poder seguir haciendo películas, que es algo "muy complicado" y venir cuatro años después con una cinta en solitario hace que se sienta "muy orgullosa, por todo lo que ello supone".

   Tras alzarse con el Gran Premio del Jurado en el Festival de Shanghái, 'Muyeres' recala en la 68 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid y se podrá disfrutar esta lunes en el Teatro Zorrilla de la capital vallisoletana en un pase con posterior coloquio.

   Por ello, Lallana ha explicado que espera que la película llegue a la "mayor cantidad de gente posible y sobre todo en salas de cine", puesto que es un largometraje que "hay que ver en gran pantalla", dado que su visualización en un ordenador "no le hará nada de justicia".

   "El diseño de sonido, la música, la fotografía, es algo muy valioso en esta película y me gustaría que la gente la pudiera disfrutar en el acto colectivo que implica el ir a una sala de cine y emocionarse de esa manera", ha concluido la directora.