VALLADOLID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La comunidad autónoma de Castilla y León registró en 2015 un total de 29.302 defunciones (422.568 en España), lo que representa un incremento del 5,45 por ciento en comparación con los datos de defunciones de 2044 (27.787), frente a un aumento del 6,8 por ciento en España, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) este lunes.
A nivel nacional, la tasa bruta de mortalidad sube un 6,9 por ciento hasta los 910,5 casos por cada 100.000 habitantes. En 2014 se registraron 852,1 fallecidos por cada 100.000 habitantes, lo que apenas representó un aumento del 1,7 por ciento con respecto del año anterior.
Las tasas brutas más elevadas de fallecidos por cada 100.000 habitantes en 2015 correspondieron a Principado de Asturias (1.297,8) seguida de Castilla y León (1.189,0) y de Galicia (1.162,8). Por su parte, las más bajas se dieron en las ciudades autónomas de Ceuta (596,6) y Melilla (609,4) y Canarias (710,1).
La tasa bruta de mortalidad aumentó en todas las regiones, salvo en la ciudad autónoma de Ceuta (-0,8 por ciento). En este caso, los mayores incrementos se dieron en Castilla-La Mancha (9,1 por ciento), Andalucía
(8,5 por ciento) y Comunidad de Madrid (8,4 por ciento).
Según el INE, las tasas brutas de mortalidad fueron más elevadas en los territorios envejecidos, "ya que normalmente hay más defunciones por el efecto de la estructura de la población por edad". Para corregirlo, explica el INE, se calculan las tasas de mortalidad estandarizadas que representan la mortalidad de la comunidad autónoma si todas tuvieran la misma composición por edad.
En este caso, las regiones con las tasas estandarizadas más elevadas fueron la ciudad autónoma de Melilla (1.083,1), Andalucía (1.003,1) y la ciudad autónoma de Ceuta (970,8) con Castilla y León (794,5) por debajo de la media (877,4).
Por sexo, fallecieron más hombres (14.776) que mujeres (14.526), al igual que en España que, en este caso, registran el incremento de la mortalidad es mucho mayor, un 7,7 por ciento más que en 2014, frente al aumento del 5,8 por ciento experimentado en hombres.
La mayoría de las defunciones a nivel nacional (96,4 por ciento) se debieron a causas naturales, enfermedades, responsables de 407.489 defunciones, un 7 por ciento más que el año anterior. En cambio, los fallecimientos por causas externas crecen sólo un 1,2 por ciento.
Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la principal causa de muerte en la mayoría de las comunidades autónomas. Las mayores tasas brutas de mortalidad por estas enfermedades se registraron en Principado de Asturias (420,3 fallecidos por 100.000 habitantes), Castilla y León (354,0) y Galicia (349,5).
Principado de Asturias y Castilla y León también tuvieron las mayores tasas de defunciones debidas a tumores, con 345,1 y 319,2 fallecidos por 100.000 habitantes, respectivamente.
Las enfermedades del sistema respiratorio se situaron como tercera causa de muerte en todas las comunidades autónomas. Por su parte, las enfermedades del sistema nervioso fueron la cuarta causa de muerte en todas las comunidades, excepto en Cantabria, Principado de Asturias y Galicia, en las que lo fueron los trastornos mentales y del comportamiento.