El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca incorpora a su colección un BMW M3 Sport Evolution

SALAMANCA 26 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca (MHAS) ha sumado a los fondos que muestra en su exposición permanente un nuevo vehículo de competición, un BMW M3 Sport Evolution Gr.A.

Con la incorporación de este modelo, según ha destacado la concejala de Deportes, Almudena Parres, el Ayuntamiento de Salamanca "refuerza su compromiso de hacer crecer este espacio y afianzarse como uno de los centros culturales más dinámico de la ciudad".

La incorporación ha contado con la presencia del piloto y actual propietario Francesc Gutiérrez Agüi, protagonista de una trayectoria de 34 años en competición, quien ha participado en diversas disciplinas deportivas, desde circuitos como GT, Endurance, Turismos, Copas, Trofeos y Clásicos hasta rallys, montaña, autocross e incluso competiciones en hielo.

El BMW M3 Sport Evolution Gr.A ahora presente en el museo, construido por los talleres de SDA Sport, participó en el Campeonato Francés de Turismos Grupo A bajo la dirección de Olivier Salam y Pierre Destic, donde logró "un destacado debut" en el Circuito de Le Mans en 1988.

Después de "una exitosa temporada", el vehículo fue adquirido por Iñaki Goiburu en 1990, quien, con una estética Evolution, alcanzó "notables victorias en pruebas nacionales y regionales de montaña", ha reseñado la información facilitada por el centro expositivo salmantino.

En 1991, Goiburu dio un salto al Campeonato de Europa, "dominando prácticamente todas las pruebas y desafiando al campeón reinante Francis Dosières"; tras su última carrera en 1992, el M3 fue adquirido por Xavi Riera y sometido a una evolución mecánica que lo hizo "aún más competitivo".

Riera cosechó victorias en circuitos y montañas, y, posteriormente, el vehículo pasó por manos de Francesc Gutiérrez, Michel France y Richard Prat, quien lo utilizó durante diez años, "obteniendo numerosas victorias y consagrándose en la Copa de Francia en 2006".

En 2009, la Federación Francesa de Automovilismo cambió las reglas, que relegó al vehículo, con más de 15 años, a la categoría GT. Esta decisión llevó a su retorno a España en manos de Francesc Gutiérrez, quien lo restauró y devolvió a la pista. Desde entonces, ha participado en tres carreras y se ha destacado principalmente en exhibiciones.