El nuevo hospital de Día Infantojuvenil de Burgos, con 24 plazas, ha atendido a 8 menores en su primer mes

BURGOS 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, ha visitado este viernes el nuevo Hospital de Día Infantojuvenil puesto en marcha en el Complejo Asistencial Universitario de Burgos (HUBU), con 24 plazas para atender a menores de entre 6 y 17 años con patología psiquiátrica y que, con una inversión de más de 300.000 euros en obras y equipos, se suma a unidades similares ya operativas en León, Salamanca y Clínico de Valladolid.

Durante su visita, el consejero de Sanidad ha reconocido la importancia de este tipo de unidades "por el creciente aumento de la demanda en la atención en salud mental a menores" y ha apuntado que en un mes ya se ha atendido en este hospital de día a ocho menores.

El Hospital de Día Infantojuvenil "es un dispositivo orientado a la atención integral y específica de niños y adolescentes con trastorno mental grave", ha explicado Vázquez, quien ha apuntado que se llevará a cabo cuando la gravedad clínica exija un abordaje más intensivo.

Por su parte, la psiquiatra Ángela Osorio ha precisado que en esta área se ofrece un tratamiento intensivo, estructurado e individualizado, limitado en el tiempo, "entre tres meses y un año" y se aplica tanto a los menores como a sus familias.

El trabajo se lleva a cabo desde una perspectiva "multidisciplinar" con psiquiatras y especialistas en psicología clínica, enfermería especializada en salud mental, terapia ocupacional y trabajo social.

El Hospital de Día burgalés está compuesto por cuatro psiquiatras, cuatro psicólogos, tres enfermeras, un técnico en cuidados auxiliares de enfermería y un terapeuta ocupacional y en el primer mes de funcionamiento han pasado ocho jóvenes por las nuevas dependencias, que cuentan con comedor terapéutico, dos aulas educativas, una sala para ocio infantil y otra para adolescentes, un laboratorio de investigación, un gimnasio, una sala de terapia grupal o una sala multisensorial.

Además de los diferentes juegos de los que disponen en las salas de ocio para relacionarse entre sí (juegos de mesa, futbolín), se está desarrollando un plan de actividades, tanto dentro como fuera del HUBU, compuesto por distintos talleres, manualidades, o, incluso celebraciones de cumpleaños, lo que facilita la asimilación de los más pequeños a los tratamientos y terapias en las que participan.

Las indicaciones más habituales para ser atendidos en el Hospital de Día Infantojuvenil se centran en los trastornos psicóticos -fases iniciales-, trastornos afectivos, trastornos de ansiedad (fobias sociales o escolares graves), trastornos del espectro autista sin discapacidad intelectual o trastornos del comportamiento y de las emociones de comienzo habitual en la infancia y la adolescencia.

La planta está dividida en dos áreas que separan a los menores por franjas de edad, de modo que las terapias grupales "puedan ser más efectivas, preservando así la intimidad de los más pequeños".

Toda el área, a su vez, se encuentra aislada del resto de actividad asistencial adulta.

Para Alejandro Vázquez, tener un hospital de día infanto-juvenil confiere "una ventaja importante" ya que la mayoría de los trastornos de los niños "deben de ser tratados lo más próximos a su domicilio, pero hay trastornos que deben, su intensidad de tratamiento requiere que todos los días visiten el hospital".