PP de Valladolid alerta de "pérdida de identidad" que supone la fusión de las cuatro fundaciones culturales en la FMC

VALLADOLID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

La progresiva fusión en la Fundación Municipal de Cultura de las cuatro fundaciones culturales municipales de Valladolid supone para el Grupo Municipal del PP la "pérdida de identidad" de todas ellas y colocar "el carro antes que los bueyes".

De este modo ha analizado hoy el presidente del Grupo del PP en el Consistorio vallisoletano, José Antonio Martínez Bermejo, el proceso en virtud del cual las cuatro fundaciones culturales municipales, las de Seminci, el Teatro Calderón, el Museo Patio Herreriano y el Museo de la Ciencia, pasarán a integrarse en la FMC, proceso que, en palabras del concejal, denota que "hay un déficit de gestión administrativa" que preocupa más al equipo de gobierno que la cultural propiamente dicha.

Sin embargo, Martínez Bermejo, en declaraciones recogidas por Europa Press, advierte de que de llevarse a término ese proceso de fusión se produciría una "pérdida de identidad" de cada una de las fundaciones absorbidas, entre las que ha destacado la Seminci, "marca de calidad desde hace sesenta y dos años", pero también las otras tres porque constituyen "hechos diferenciales que no se dan en otras ciudades de Castilla y León y ni siquiera de España".

PELIGRO DE RETIRADA DE PATROCINIOS

A esa pérdida identitaria añade el edil 'popular' el posible riesgo de pérdida de patrocinios, "y no está la cosa para perder financiación", añade Martínez Bermejo, quien tampoco olvida los "problemas innecesarios" que pueden ocasionarse a los trabajadores de las cuatro fundaciones en términos de "congelación y sin capacidad de promoción".

Por eso, el Grupo Municipal del PP aboga por mantener la identidad propia de cada una de estas cuatro fundaciones y que la carga administrativa "se residencie" en la FMC, de forma que las primeras mantengan su naturaleza cultural "y su única preocupación sea la gestión de la cultura en su ámbito propio", para que la FMC, a través de un convenio y el refuerzo que se estime oportuno, pueda llevar a cabo la labor puramente administrativa.

"La gestión cultural prima sobre la administrativa", sentencia Martínez Bermejo.